El pasado 6 de marzo del año en curso publicamos en la revista códigoF un artículo titulado “La guerra mundial de la investigación contra las resistencias bacterianas convocada por la ONU”, en el que informábamos que ante la perdida de eficacia de los antibióticos, incluyendo los más potentes como los carbapenémicos y las cefalosporinas de tercera generación (considerados los mejores antibióticos disponibles para tratar las bacterias multirresistentes), y el riesgo inherente que conlleva para la salud y la vida humana, la Organización Mundial de la Salud (OMS) convocó a los investigadores de todo el orbe a enfocar sus baterías investigativas al descubrimiento y desarrollo de nuevos antibióticos capaces de enfrentar con éxito a las bacterias que antaño los antibióticos podían vencer y que hoy, como producto del uso indebido e muchas veces innecesario de estos fármacos, han desarrollado gran parte de estos agentes infecciosos.

Llegará un día en que cualquiera podrá comprar la penicilina en las tiendas. Entonces existirá el peligro de que un hombre ignorante pueda fácilmente tomar una dosis insuficiente y que al exponer sus microbios a cantidades no letales del fármaco los haga resistentes”. Alexander Fleming

La noticia que hoy les presentamos es muestra de que en la búsqueda de nuevas opciones antibióticas tienen que expandir sus fronteras y ampliar sus límites creativos para encontrar soluciones a un problema tan acuciante como es la capacidad de resistir a los antibióticos desarrollada por las bacterias.

Entre otros, un grupo de científicos liderados por Barney M. Bishop miembro del departamento de química y bioquímica de la Universidad George Mason en Manassas, Virginia, EE.UU.; Melanie L. Juba de la misma universidad y Paul S. Russo del Centro de Proteómica Aplicada y Medicina Molecular de la Universidad George Mason,, publicaron el pasado 6 de febrero en la revista Journal of Proteome Research un artículo titulado “Descubrimiento de nuevos péptidos antimicrobianos del Varanus komodoensis (dragón de Komodo) por análisis a gran escala y secuenciación asistida por de-Novo, utilizando la espectrometría de masas por disociación de transferencia de electrones” (Discovery of Novel Antimicrobial Peptides from Varanus komodoensis (Komodo Dragon) by Large-Scale Analyses and De-Novo-Assisted Sequencing Using Electron-Transfer Dissociation Mass Spectrometry), la cual da cuenta de la evaluación de una serie de péptidos antimicrobianos encontrados en la sangre de estos reptiles, los cuales ponderaron contra Pseudomonas aeruginosa y Staphylococcus aureus.

¿Cómo surge la idea de esta investigación?
Para poner en contexto la nota les comentamos que el dragón de Komodo (Varanus komodoensis), también conocido como monstruo de Komodo y varano de Komodo, es el lagarto de mayor tamaño del mundo, perteneciente a la familia de los varánidos, el cual es una especie de algunas islas de Indonesia central, que tiene una longitud promedio de entre dos y tres metros y un peso corporal de alrededor de 70 kg.

Los dragones de Komodo son carnívoros y se alimentan principalmente de carroña, aunque también cazan presas vivas.

El herpetólogo Walter Auffenberg de la Universidad de Florida, EE.UU., determinó (en un estudio realizado en otro contexto) que en la saliva de los dragones de Komodo se encontraban patógenos sépticos, entre los que destacaban las bacterias: Escherichia coli, Staphylococcus sp., Providence sp., Proteus morgani y P. Mirabilis.

Lo sorprendente es que a pesar de que estos animales tienen estas bacterias en la saliva, ingieren carne en descomposición, beben agua altamente contaminada, y son mordidos por otros ejemplares de la misma especie, todo ello plagado de bacterias, sin que causen daño alguno a su salud.

Partiendo de este conocimiento, los científicos se plantearon la hipótesis de que algo en el sistema inmunológico de los dragones de Komodo tendría alguna particularidad única que les permite lidiar con éxito contra múltiples familias bacterianas.

El estudio y sus resultados

Los científicos identificaron 48 nuevos péptidos (moléculas formadas por la unión de dos o más aminoácidos mediante enlaces peptídicos que se diferencian de las proteínas en que son más pequeñas, es decir, tienen menos aminoácidos) antimicrobianos catiónicos potenciales en la sangre del dragón de Komodo, obtenidos a partir de proteínas histonas.

La eficacia antimicrobiana de ocho de estos péptidos se evaluó frente a Pseudomonas aeruginosa y Staphylococcus aureus.

Los resultados mostraron que siete de estos péptidos tienen una actividad antimicrobiana eficaz contra ambos microbios y el octavo tiene significativa potencia contra P. aeruginosa.

Para darnos cuenta de la importancia del hallazgo realizado por estos científicos les comentamos que entre la lista de bacterias para las que la ONU pide urgentemente el desarrollo de nuevos antibióticos se encuentra como “Prioridad 1: CRÍTICA” la Pseudomonas aeruginosa y en la Prioridad 2: ELEVADA, el Staphylococcus aureus

Estos primeros hallazgos abren una plétora de posibilidades investigativas para el descubrimiento de nuevos agentes antimicrobianos que permitirán el desarrollo de nuevos antibióticos que enfrenten, con rapidez y eficacia, a las bacterias que hoy amenazan la vida humana.

Fuentes:

Journal of Proteome research. Discovery of Novel Antimicrobial Peptides from Varanus komodoensis (Komodo Dragon) by Large-Scale Analyses and De-Novo-Assisted Sequencing Using Electron-Transfer Dissociation Mass Spectrometry

Wikipedia. Varanus komodoensis.

Wikipedia. Péptidos.

  • Código F. La guerra mundial de la investigación contra las resistencias bacterianas convocada por la ONU.

La guerra mundial de la investigación contra las resistencias bacterianas convocada por la OMS