A punto de concluir el 2019, les recomendaremos la película “93 días”, del director nigeriano Steve Gukas, realización que en poco más de 120 minutos narra el arribo a Lagos, capital de Nigeria, de Patrick Oliver Sawyer, un ciudadano liberiano nacionalizado estadounidense de 40 años, contagiado con el virus del Ébola, y la crisis sanitaria que se desató a partir de su llegada.
Sawyer arribó el 20 de julio de 2014 a Lagos (ciudad con cerca de 22 millones de habitantes actualmente), y capital económica de la República Federal de Nigeria, país que alberga la mayor población del continente africano con 190 millones de habitantes hoy día, en muy malas condiciones de salud, siendo internado inmediatamente en el nosocomio privado First Consultant Medical Centre, en el que un grupo de médicos, liderados por la doctora Ameyo Adadevoh, diagnosticaron la presencia de esta terrible enfermedad. Sawyer falleció cuatro días después, dejando detrás de sí la posibilidad real de una pandemia.
El título de la película hace referencia al lapso transcurrido entre la llegada de Sawyer, el “paciente cero” y la conclusión de la alerta sanitaria que éste sujeto desató involuntariamente en Nigeria, nación en la que un grupo de heroicos personajes ayudó, aún a costa de sus vidas, a detener la expansión del virus.
Es importante comentar que aunque por momentos la película es un poco “empalagosa”, su realización y una correcta narrativa logran atrapar a los espectadores, transmitiendo la gravedad de la situación y el riesgo potencial de que se detonara una pandemia global de costes humanos y financieros incalculables.
Entre otros actores, destaca la participación del único actor conocido en nuestro país, Danny Glover, en el papel del director del hospital donde es internado Sawyer, así como de múltiples histriones nigerianos desconocidos para el público mexicano, como Bimbo Akintola, Gideon Okeke, Bimbo Manuel, Charles Okafor, el actor escocés Alastair Mackenzie y el norteamericano Tim Reid.