La carencia de una definición estandarizada y consensuada a nivel mundial impide el avance de la caracterización de su epidemiología y el desarrollo de tratamientos.
Mientras muchas naciones de ingresos bajos y medios aún se encuentran luchando arduamente para incrementar las tasas de vacunación básica y disminuir el número y la gravedad de los contagios, otros países del orbe ya están enfocados en atender los síntomas persistentes en millones de personas que superaron la enfermedad, pero que desde su inicio, e incluso durante muchos meses después de haber sido dados de alta, continúan presentando malestares que les impiden retomar su vida.
“Conocido por una variedad de nombres, incluido COVID de larga distancia y enumerado en la clasificación ICD-10 como condición posterior a COVID-19 desde septiembre de 2020, esta ocurrencia es variable en su expresión y su impacto. La ausencia de una definición estandarizada y consensuada a nivel mundial obstaculiza el progreso en la caracterización de su epidemiología y el desarrollo de tratamientos candidatos.” The Lancet | Infectious Diseases. A clinical case definition of post-COVID-19 condition by a Delphi consensus.
En este contexto era impostergable la necesidad de establecer una definición objetiva y ampliamente consensuada sobre lo qué es y representa la COVID persistente como una entidad médica reconocible, lo que además de ayudar a comprenderla, permitirá establecer mejores criterios de diagnóstico, manejo clínico y tratamiento de los pacientes; su inclusión en los informes epidemiológicos para obtener datos estadísticos confiables; el diseño de proyectos de investigación; la formulación de políticas; la instauración de parámetros claros para el trámite y otorgamiento de incapacidades temporales o bajas definitivas, así como su inclusión en los seguros de gastos médicos y de vida.
Para alcanzar una definición amplia y sólida, la Organización Mundial de la Salud (OMS) coordinó un proceso o método Delphi, el que incluyó un panel internacional de 265 pacientes, médicos, investigadores y personal de la misma Organización, proceso en el que se evaluaron 14 dominios y 45 ítems en dos rondas del proceso Delphi para crear la definición final exclusiva para pacientes adultos (no aplicable a infantes), la que compartimos a continuación:
“La afección posterior al COVID-19 ocurre en personas con antecedentes de infección probable o confirmada por SARS-CoV-2, generalmente 3 meses desde el inicio del COVID-19 con síntomas que duran al menos 2 meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo. Los síntomas comunes incluyen (entre una larga lista más) fatiga, dificultad para respirar, disfunción cognitiva, y generalmente tienen un impacto en el funcionamiento diario. Los síntomas pueden ser de nueva aparición después de la recuperación inicial de un episodio agudo de COVID-19 o persistir desde la enfermedad inicial. Los síntomas también pueden fluctuar o recaer con el tiempo”.
“Para cerrar estas brechas y cumplir con los objetivos globales, debemos continuar enfocándonos en la distribución equitativa de servicios y el acceso a atención médica de calidad y asequible e intervenciones efectivas en todos los países y para todas las poblaciones. También debemos estar alerta de que COVID-19 ha interrumpido muchos servicios esenciales y que la distribución de los trabajadores de la salud y el cuidado varía ampliamente, con la menor densidad de médicos, enfermeras y parteras en las áreas donde más se necesitan. El gasto de bolsillo en atención médica también está aumentando, y las poblaciones más vulnerables corren mayor riesgo de caer en la pobreza, lo que agrava aún más las desigualdades”. World Health Statistics. OMS.
Sin embargo, y a pesar de que esta es una definición amplia, sólida y consensuada, los responsables de estudio declararon: “La COVID-19 seguirá siendo un desafío en el futuro previsible. Quedan muchas respuestas pendientes en torno a COVID-19 y sus secuelas, y constantemente se formulan nuevas preguntas. Esta definición global de condición post-COVID-19 ayudará a avanzar tanto en la defensa como en la investigación, pero probablemente cambiará a medida que surjan nuevas pruebas y nuestra comprensión de las consecuencias del COVID-19 continúe evolucionando”.
Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF.
Fuentes:
The Lancet / Infectious Diseases. (21 de diciembre del 2021).
A clinical case definition of post-COVID-19 condition by a Delphi consensus.
medRxiv. (3 de Julio del 2021). Persistent symptoms following SARS-CoV-2 infection in a random community sample of 508,707 people.
Organización Mundial de la Salud. (2021).
World Health Statistics.