El cáncer de mama

De acuerdo con información proporcionada por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el cáncer de mama es el más común entre las mujeres y representa el 29% del total de casos de cáncer, aunque ocupa el segundo lugar en mortalidad entre los diferentes cánceres que aquejan a las mujeres, superado por el cáncer de pulmón.

Si bien es cierto que la prevalencia del cáncer de mama se da por igual en países desarrollados y en desarrollo, el número de muertes causadas por esta enfermedad es mayor en los segundos, ya que los diagnósticos se hacen generalmente en estadios más avanzados del padecimiento, impidiendo o limitando a los médicos dar a sus pacientes un tratamiento oportuno y con mayores probabilidades de éxito.

Para el 2030, la OPS estima que se presentarán más de 596,000 casos nuevos de cáncer de mama y más de 142,100 muertes en el continente americano, con una mayor preponderancia en la zona de América Latina y el Caribe.

Ya que no ha sido posible identificar una causa detonante para la aparición del cáncer de mama, se considera que, como otros tipos de cáncer, es un padecimiento multifactorial, aunque se han identificado algunos elementos que incrementan el riesgo de desarrollarlo.

Entre estos factores destacan: el tabaquismo, las dietas ricas en grasas animales y ácidos grasos trans, los altos niveles de estrógeno en la sangre, la obesidad, el elevado consumo de alcohol, la toma de hormonas (anticonceptivos orales y tratamientos de sustitución hormonal) por un periodo mayor a cinco años, la exposición prolongada a estrógenos endógenos (relacionados con el inicio temprano de la menstruación), tener un primer parto a una edad madura, no haber tenido descendencia, o la menopausia tardía.

Si bien es cierto que cuando los factores enunciados previamente se combinan con variables ambientales y genéticas, las posibilidades de padecer cáncer de mama se incrementan. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) coinciden en que los principales detonadores para la enfermedad son el consumo de alcohol excesivo (mayor a 15 gramos al día), el sobrepeso, la obesidad y la falta de actividad física.

Técnica alternativa para la detección temprana de cáncer de mama

La agencia informativa del Consejo Nacional para la Ciencia y la Tecnología (CONACYT) informo que el Dr. Nicandro Cruz Ramírez, académico del Centro de Investigación en Inteligencia Artificial (CIIA) de la Universidad Veracruzana, desarrolló una técnica alternativa para la detección temprana de cáncer de mama, usando termografías y algoritmos de minería de datos (data mining), que le permitirán al especialista médico descartar o confirmar la presencia de este tipo de cáncer.

La minería de datos o exploración de datos es un campo de la estadística y las ciencias de la computación que se refiere al proceso que busca determinar e identificar patrones en grandes volúmenes de conjuntos de datos, utilizando para ello los métodos de la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y los sistemas de bases de datos. Su objetivo general es extraer información de un conjunto de datos y transformarla en una estructura comprensible para su uso posterior.

Sobre la termografía como herramienta de detección del cáncer de mama el investigador mencionó que “Se sabe que los tumores cancerosos se alimentan de sangre, lo que hacemos es tomar una foto de las mamas y mediante esta práctica, a través de la temperatura corporal, se puede obtener un indicador que arroje un resultado sobre el padecimiento”.

Con el análisis de las termografías y utilizando la minería de datos, el Dr. Cruz Ramírez está tratando de obtener un patrón (no perceptible a la vista), a través de las diferentes variables que muestran una gran cantidad de termografías de pacientes.

La información obtenida es cargada a una base de datos, con la que Cruz Ramírez analiza y estudia las variables más importantes, que podrían ser útiles para una detección temprana de cáncer de mama, mejorando las posibilidades de un tratamiento exitoso.

Cruz Ramírez, que obtuvo el grado de doctor en inteligencia artificial en la Universidad de Sheffield, en el Reino Unido, trabaja conjuntamente con un oncólogo del sector salud, que es el responsable de obtener las imágenes termográficas de sus pacientes.

El doctor Nicandro Cruz Ramírez comentó que este procedimiento de diagnóstico no pretende reemplazar a la mastografía, sino que ambos procesos sean utilizados en conjunto: “Ninguna técnica (mastografía y termografía) es mejor que otra, ambas tienen sus pros y sus contras. La ventaja de la termografía con el uso de la minería de datos es que resulta más sencilla de aplicar y sus costos son menores. Este método alternativo, al no exponer a la paciente a la radiación, puede ser usado en mujeres desde muy temprana edad y en repetidas ocasiones el mismo año, al contrario de la mamografía. Por otro lado, el fácil desplazamiento de dicha herramienta permite que sea llevado a comunidades rurales de difícil acceso, solo basta con capturar la imagen y hacer uso de la base de datos para arrojar un diagnóstico”.

Es importante destacar que este nuevo procedimiento podría ayudar a reducir los índices de mortalidad provocados por el cáncer de mama, ya que únicamente se requiere capturar la termografía y alimentar con ella la base de datos para obtener un diagnóstico.

Fuentes

Conacyt, agencia informativa. Termografías y algoritmos para detección de cáncer de mama.

INEGI. Estadísticas a propósito del Día Mundial de la lucha contra el cáncer de mama. Datos nacionales.

Wikipedia. Minería de datos. Consulta realizada el 4 de enero del 2016.