A finales de abril, la Organización Mundial de la Salud (OMS) liberó el informe “No podemos esperar: Asegurar el futuro contra las infecciones farmacorresistentes”, elaborado por la Interagency Coordination Group on Antimicrobial Resistente (IACG), cuyo mensaje central destaca que la resistencia antimicrobiana plantea una crisis mundial que pone en riesgo un siglo de avances en materia de salud y la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
“Como los factores que impulsan la resistencia a los antimicrobianos se encuentran en los seres humanos, los animales, las plantas, los alimentos y el medio ambiente, es esencial una respuesta sostenida con el enfoque de «Una salud» para involucrar y unir a todas las partes interesadas en torno a una visión y unos objetivos compartidos”.
Entre otros datos de suma importancia, el documento asegura que las enfermedades farmacorresistentes provocan, al menos, 700 mil fallecimientos prematuros al año a nivel global, cifra que en el escenario más crítico podría incrementarse a 10 millones de muertes para el año 2050, tanto en países con ingresos bajos y medianos, como elevados, lo que a la par de la lamentable pérdida de vidas, habría que sumar un enorme impacto financiero.
Los especialistas indican que el impacto económico ocasionado por la resistencia antimicrobiana podría llegar a ser tan severo como el ocasionado por la crisis financiera mundial de 2008-2009, como consecuencia directa del espectacular aumento de los gastos en atención sanitaria, el impacto en la producción de alimentos y piensos (alimento seco que se da al ganado), el comercio, los medios de vida, el crecimiento de los actuales niveles de pobreza y desigualdad.
“Los desafíos que plantea la resistencia a los antimicrobianos son complejos y multifacéticos, pero no insuperables. La aplicación de las recomendaciones presentadas en este informe ayudará a salvar millones de vidas, a mantener los avances económicos y de otra índole en materia de desarrollo, y a asegurar el futuro contra las infecciones farmacorresistentes”.
El documento incluye cinco recomendaciones que los miembros del IACG consideran indispensables para evitar una crisis que parece estás tocando a nuestra puerta.
Acelerar los progresos en los países.
A1: El IACG hace un llamamiento a todos los Estados Miembros para que garanticen un acceso equitativo y asequible a los antimicrobianos nuevos y ya existentes de calidad garantizada, así como a alternativas, vacunas y pruebas diagnósticas, y su uso prudente y responsable por parte de profesionales competentes y autorizados de los ámbitos de la salud humana, animal y vegetal.
A2: El IACG hace un llamamiento a todos los Estados Miembros para que, en el contexto de los ODS, aceleren la elaboración y aplicación de planes de acción nacionales contra la resistencia a los antimicrobianos basados en el enfoque de “Una salud”.
A3: El IACG hace un llamamiento a todos los Estados Miembros con el fin de que eliminen gradualmente el uso de antimicrobianos para estimular el crecimiento, de conformidad con las orientaciones de los organismos de la iniciativa tripartita (FAO, OIE y OMS) y el Codex Alimentarius, empezando por poner fin de inmediato al uso de los antibióticos clasificados como agentes antimicrobianos de importancia crítica de máxima prioridad que figuran en la Lista OMS de Antimicrobianos de Importancia Crítica para la Salud Humana (es decir, las quinolonas, las cefalosporinas de tercera generación o ulteriores, los macrólidos y cetólidos, los glicopéptidos y las polimixinas).
Innovar para asegurar el futuro.
B1: El IACG hace un llamamiento a los donantes públicos, privados y filantrópicos y a otras entidades de financiación para que incrementen la inversión y la innovación en nuevos antimicrobianos (especialmente antibióticos) de calidad garantizada, compuestos novedosos, pruebas diagnósticas, vacunas, herramientas de gestión de desechos y alternativas seguras y eficaces a los antimicrobianos para la salud de los seres humanos, los animales terrestres y acuáticos y las plantas, así como en investigaciones operacionales.
B2: El IACG recomienda que las iniciativas presentes y futuras sobre el acceso mundial promuevan y apoyen el acceso equitativo y asequible a antimicrobianos, pruebas diagnósticas, vacunas, herramientas de gestión de desechos y alternativas seguras y eficaces a los antibióticos, tanto nuevos como ya existentes y de calidad garantizada, en el ámbito de la salud humana, de los animales terrestres y acuáticos y de las plantas.
B3: El IACG hace un llamamiento a las entidades públicas, privadas y filantrópicas que financian investigaciones y a otras partes interesadas para que, partiendo de las iniciativas actuales de investigación y desarrollo, inviertan en nuevos antimicrobianos, pruebas diagnósticas, vacunas, herramientas de gestión de desechos y alternativas seguras y eficaces a los antimicrobianos y fortalezcan la investigación operacional y sobre la aplicación y la coordinación y colaboración en este ámbito en el contexto del enfoque de “Una salud”.
Colaborar en aras de una acción más eficaz.
C1: El IACG pide la participación sistemática y significativa de los grupos y organizaciones de la sociedad civil como partes interesadas clave en la respuesta basada en el enfoque de “Una salud” a la resistencia a los antimicrobianos a nivel mundial, regional, nacional y local.
C2: El IACG pide la participación sistemática y significativa del sector privado y la intensificación de sus actividades como parte interesada clave en la respuesta de «Una salud» a la resistencia a los antimicrobianos a nivel mundial, regional, nacional y local.
Invertir en una respuesta sostenible.
D1: El IACG hace un llamamiento a los gobiernos, a las instituciones y bancos de financiación y desarrollo mundiales, regionales, nacionales, bilaterales y multilaterales y a los inversores privados para que apliquen sistemáticamente normas con miras a evaluar los riesgos y los efectos de la resistencia a los antimicrobianos (desde una perspectiva basada en la resistencia a los antimicrobianos y en el enfoque de «Una salud») a la hora de realizar inversiones.
D2: El IACG hace hincapié en la necesidad de mayores inversiones en la respuesta a la resistencia a los antimicrobianos, incluida una mayor financiación interna en todos los países; insta a los mecanismos de financiación existentes y futuros de los ámbitos de la salud humana, animal y vegetal, de la producción de alimentos y piensos y del medio ambiente a que concedan una mayor prioridad a la resistencia a los antimicrobianos en la asignación de sus recursos; y hace un llamamiento a los donantes públicos, privados y filantrópicos para que aporten más fondos, en particular con el fin de apoyar la aplicación de los planes de acción nacionales contra la resistencia a los antimicrobianos.
Fortalecer la rendición de cuentas y la gobernanza mundial.
E1: El IACG pide a los organismos de la iniciativa tripartita (FAO, OIE y OMS), al PNUMA, a otros organismos de las Naciones Unidas y al Banco Mundial que, en el contexto de la reforma de las Naciones Unidas, refuercen la acción conjunta en el marco del enfoque de «Una salud», sobre la base del establecimiento de metas y de la definición de las prioridades y necesidades nacionales, mediante el aumento de su capacidad organizativa y el suministro de financiación básica adecuada y sostenible para las actividades relacionadas con la resistencia a los antimicrobianos.
E2: El IACG recomienda el establecimiento urgente de un Grupo de liderazgo mundial sobre la resistencia a los antimicrobianos basado en el enfoque de «Una salud» que cuente con el apoyo de una secretaría conjunta gestionada por los organismos de la iniciativa tripartita (FAO, OIE y OMS).
E3: El IACG pide al Secretario General que, en estrecha colaboración con los organismos de la iniciativa tripartita (FAO, OIE y OMS), el PNUMA y otras organizaciones internacionales, reúna a un Grupo independiente sobre datos probatorios para fundamentar medidas de lucha contra la resistencia a los antimicrobianos para que, en el marco del enfoque de «Una salud», examine los datos científicos y probatorios relacionados con la resistencia a los antimicrobianos, así como las consecuencias y los riesgos que dicha resistencia puede conllevar en el futuro, presente informes periódicamente a los Estados Miembros al respecto, y recomiende opciones de adaptación y mitigación.
E4: El IACG valora el proceso en curso dirigido por los Estados Miembros para elaborar el marco mundial de desarrollo y gestión responsable para combatir la resistencia a los antimicrobianos e insta a los organismos de la iniciativa tripartita (FAO, OIE y OMS) y al PNUMA a agilizar su creación, de conformidad con el alcance de la resolución WHA68.7 de la Asamblea Mundial de la Salud de 2015 relativa a la resistencia a los antimicrobianos. A medida que los Estados Miembros completan este proceso, también deberían tener en cuenta la necesidad de crear nuevos instrumentos internacionales.
El contexto bajo el que la IACG elaboró sus recomendaciones considera que:
- La resistencia a los antimicrobianos plantea una crisis mundial que pone en riesgo un siglo de avances en materia de salud.
- No podemos esperar. Si el mundo no actúa urgentemente, la resistencia a los antimicrobianos tendrá efectos desastrosos en una generación.
- Una respuesta sostenida y basada en el enfoque de “Una salud” a la resistencia a los antimicrobianos es esencial para involucrar y unir a todas las partes interesadas en torno a una visión y objetivos compartidos.
- La aplicación acelerada de planes de acción nacionales basados en el enfoque de “Una salud” debe constituir el núcleo de la respuesta mundial a la resistencia a los antimicrobianos.
- Se necesitan más innovaciones para hacer frente a la resistencia a los antimicrobianos en todo el espectro del enfoque de “Una salud”.
- El mundo tiene que actuar e invertir ya para hacer frente a la resistencia a los antimicrobianos o lo pagará muy caro en el futuro.
- La respuesta basada en “Una salud” a la resistencia a los antimicrobianos requiere mayor liderazgo, promoción, coordinación y rendición de cuentas a todos los niveles.