Desde la publicación de las primeras noticias sobre esta nueva cepa de coronavirus en diciembre del 2019, la industria farmacéutica colabora cercana e intensamente con la comunidad científica y médica global buscando soluciones terapéuticas para colaborar con las autoridades de salud a fin de aliviar a las personas contagiadas por el patógeno, y así evitar que muchos millones de seres humanos sean infectados.
Asumiendo con responsabilidad nuestro lugar en esta batalla de interés global, y gracias a las aceleradas investigaciones científicas que se están generando actualmente en múltiples centros de trabajo del mundo, nos enfocamos en desarrollar; desde las pruebas diagnósticas que permitan dimensionar la magnitud de la dispersión del SARS-CoV-2 que ayuden a disminuir los contagios; el diseño de nuevos fármacos y el aprovechamiento de los ya existentes para proteger la vida y devolver la salud a los enfermos por la COVID-19, así como la búsqueda de la vacuna o vacunas que nos protejan preventivamente contra el virus.
De manera específica, pudiendo no ser exhaustivos, compartimos la siguiente lista de las investigaciones en marcha.
De acuerdo con información proporcionada por la Alianza para las Vacunas (GAVI Alliance), el lapso necesario para desarrollar, probar y liberar una vacuna puede consumir entre 10 y 15 años, aunque la misma organización aclara que, en una situación de emergencia como la planteada por el nuevo coronavirus, aunada al uso de nuevas tecnologías y descubrimientos previos, el tiempo inicialmente requerido puede abatirse sustancialmente, como ocurrió con el desarrollo de la vacuna contra el Ébola.
En todo el mundo están en desarrollo más de un centenar de vacunas contra la COVID-19 de las cuales informa de manera periódica la OMS en el “Panorama de las vacunas candidatas de la OMS” que puede ser consultado descargándolo aquí.
Así mismo, la asociación de salud pública Gavi (The Vaccine Alliance) realiza un monitoreo del desarrollo las vacunas candidatas que se encuentran desde la Fase I y hasta las de Fase III. Dicha información puede consultarse aquí.
Finalmente, compartimos dos fuentes más del rastreo de vacunas contra la COVID-19 que, también se actualizan de manera periódica.
Ante el escenario en expansión de contagios de Covid-19 que actualmente experimentamos en México, es imperativo contar con pruebas diagnóstico que ayuden a saber quien es portador del virus SARS CoV2, especialmente en personas asintomáticas. Existen tres tipos:
Las dos últimas no son recomendadas por la Organización Mundial de la Salud para diagnosticar a un paciente que necesita atención. Sin embargo, estas pruebas ayudan a identificar el contacto previo de una persona con el virus SARS-CoV-2.
En este sentido, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), en conjunto con el Instituto Nacional de Nutrición y Ciencias Médicas “Salvador Zubirán” y TecSalud del Tecnológico de Monterrey, trabajan de manera conjunta en un protocolo de evaluación que permite garantizar la eficacia de las pruebas serológicas IgG e IgM para COVID-19.
Consulte el listado actualizado de las pruebas autorizadas en México.
Actualmente no existe ningún tratamiento farmacológico específico disponible para prevenir o atender la COVID-19. Sin embargo; es posible que algunos medicamentos ya autorizados o combinaciones de estos puedan servir para el tratamiento del padecimiento.
Conozca más información en los siguientes enlaces:
IFPMA.
Informe de los trabajos de la industria biofarmacéutica mundial.
BioWorld.
Productos terapéuticos en desarrollo.
ClinicalTrials.gov.
Estudios clínicos registrados relacionados con la enfermedad por coronavirus (COVID-19).
Finalmente, es necesario mencionar que el sector farmacéutico y el de dispositivos médicos están trabajando en coordinación con las autoridades nacionales e internacionales, para atender, entre otras, la demanda de insumos médicos, equipos de protección personal para los profesionales de la salud y respiradores.