El informe de la OMS aborda el consumo de cigarrillos, pipas, cigarros, pipas de agua, productos de tabaco sin humo (como bidis, cheroots y kretek) y productos de tabaco calentados. El informe no abarca los cigarrillos electrónicos.
Sin lugar a dudas, una de las más trascendentales conclusiones del informe, es que por primera ocasión desde que se efectúa el estudio, el número de hombres que consumen tabaco está disminuyendo, lo que refleja un importante cambio en lo que la OMS califica como “epidemia mundial de tabaquismo”.
Es necesario mencionar que entre las acciones más efectivas para frenar el consumo de este segmento de productos, se encuentran las campañas informativas sobre los peligros para la salud que acarrea el consumo activo o pasivo del tabaco; la creación, ampliación y respeto irrestricto de los espacios libres de humo; la implementación y el cumplimiento de las leyes que impiden o limitan la publicidad, promoción y patrocinios de marcas tabacaleras, así como el aumento de los impuestos sobre estos productos.
La OMS considera que las cifras demuestran la importancia vital de las acciones tomadas por los gobiernos para frenar el consumo del tabaco. Sin embargo, y a pesar de que alrededor del 60% de los países muestran una propensión sostenida en la disminución del consumo del mismo desde 2010, únicamente, y de mantenerse esta tendencia, solo 32 países alcanzarán potencialmente la reducción propuesta del 30%.
“La disminución del consumo de tabaco entre los hombres marca un punto de inflexión en la lucha contra el tabaco. Durante muchos años hemos sido testigos del aumento constante del número de hombres que consumen productos mortales de este tipo. Pero ahora, por primera vez, estamos viendo una disminución en el consumo masculino, impulsado por el hecho de que los gobiernos están siendo más duros con la industria tabacalera. La OMS seguirá colaborando estrechamente con los países para mantener esta tendencia a la baja”. Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS.
De acuerdo con el Informe Mundial de la OMS sobre las tendencias de la prevalencia del consumo de tabaco en 2000-2025 (tercera edición), durante casi las últimas dos décadas, el número total de consumidores de tabaco a nivel mundial pasó de 1 397 000 millones en 2000 a 1 337 000 millones en 2018, lo que supone aproximadamente una disminución de 60 millones de personas.
La OMS espera que para el 2020, haya 10 millones menos de consumidores de tabaco entre hombres y mujeres, en comparación con 2018, y otros 27 millones menos para 2025.
Si bien es cierto que la noticia es altamente positiva, los especialistas acotan que a pesar de los avances alcanzados, los progresos en el cumplimiento de la meta mundial para reducir el consumo de tabaco, fijada en un 30%, cuando mucho llegará al 23% para 2025. “Ha disminuido el número de personas que consumen tabaco, lo que constituye un paso importante para la salud pública mundial. Sin embargo, queda mucho por hacer. Si no se intensifican las medidas nacionales, la reducción prevista del consumo de tabaco seguirá sin estar a la altura de las metas mundiales de reducción. No debemos cejar en la lucha contra las grandes tabacaleras”. Dr. Vinayak Prasad, Jefe de la Unidad de Control del Tabaco de la OMS.
Compartimos con ustedes alguna otras conclusiones relevantes sobre el tema:
- Niños: Aproximadamente 43 millones de niños (entre los 13 a 15 años) consumían tabaco en 2018 (14 millones de niñas y 29 millones de niños).
- Mujeres: El número de mujeres consumidoras de tabaco en 2018 era de 244 millones. Para 2025, debería haber 32 millones menos de mujeres que consumen tabaco. La mayoría de los avances se están logrando en los países de ingresos bajos y medios. Europa es la región que progresa más lentamente en la reducción del consumo de tabaco entre las mujeres.
- Tendencias en Asia: La Región de Asia Sudoriental de la OMS tiene la tasa más alta de consumo de tabaco, que es de más del 45% de los hombres y mujeres de 15 años o más; sin embargo, se prevé que para 2025 la tendencia disminuirá rápidamente a niveles similares a los observados en las Regiones de Europa y el Pacífico Occidental (alrededor del 25%). Se prevé que la Región del Pacífico Occidental, incluida China, supere a Asia Sudoriental como la región con la tasa media más alta entre los hombres.
- Tendencias en las Américas: Quince países de las Américas están en vías de alcanzar la meta de reducción del consumo de tabaco en un 30% para 2030, lo que la convierte en la región con mejor desempeño de las seis regiones de la OMS.
La epidemia de tabaquismo es una de las mayores amenazas para la salud pública que ha tenido que afrontar el mundo. Mata a más de 8 millones de personas al año, de las cuales más de 7 millones son consumidores directos y alrededor de 1,2 millones son fumadores pasivos.
- Medidas normativas: un número creciente de países están aplicando medidas eficaces de control del tabaco que consiguen reducir el consumo de tabaco. Los impuestos al tabaco no solo ayudan a reducir el consumo de tabaco y los costos de la atención de la salud, sino que también representan una corriente de ingresos para la financiación del desarrollo en muchos países.
- Cada año, más de 8 millones de personas mueren a causa del consumo de tabaco, lo que representa aproximadamente la mitad de los consumidores. Más de 7 millones de esas muertes se deben al consumo directo de tabaco, mientras que alrededor de 1.2 millones son consumidores pasivos. La mayoría de las muertes relacionadas con el tabaco se producen en países de ingresos bajos y medios, los que son objeto de una intensa injerencia y actividad de comercialización por parte de la industria tabacalera.
- En los adultos, el humo ajeno ocasiona graves trastornos cardiovasculares y respiratorios, como coronariopatías y cáncer de pulmón; aumenta el riesgo de muerte súbita del lactante, causando complicaciones durante el embarazo y bajo peso de los recién nacidos.
- Casi la mitad de los niños respiran habitualmente aire contaminado por humo de tabaco en lugares públicos.
- 65 000 niños fallecen cada año por enfermedades causadas por el humo de tabaco.