La suspensión de los servicios de medicina básica, ocasionó que muchos casos nuevos de tuberculosis no fueran diagnosticados ni tratados, acarreando un mayor número de contagios y muertes, a pesar de que la enfermedad se puede prevenir y curar hasta en un 85% de los casos, cuando se trata oportunamente.
Entre los múltiples daños colaterales a la salud ocasionados por la prolongada, e inacabada, pandemia de COVID-19, la Organización Mundial de la Salud (OMS), destaca que durante 2021, alrededor de 10.6 millones de seres humanos contrajeron tuberculosis, una cifra que rebasa en 4.5% a lo ocurrido durante el año inmediato anterior, y que acarreó la muerte de 1.6 millones de personas, de las que 187 mil seropositivas para el VIH.
El bacilo tuberculoso (Mycobacterium tuberculosis) es el segundo patógeno más mortífero después del virus que causa la COVID-19, y afecta con mayor frecuencia a adultos varones, transmitiéndose por vía aérea, cuando las personas infectadas expulsan al aire las bacterias, al toser, estornudar, hablar, o gritar. por regla general, las bacterias atacan a los pulmones, pero también pueden afectar a otras partes del cuerpo, como los riñones, la columna vertebral y el cerebro.
Estas cifras están contenidas en el informe mundial sobre la tuberculosis de 2022 de la OMS, en el que la Organización también concluye que la carga de tuberculosis farmacorresistente se incrementó un 3% entre 2020 y 2021, año en el que se detectaron 450 mil nuevos casos de tuberculosis resistente a la rifampicina.
“El número de nuevos casos pasó de 7.1 millones en 2019, a 5.8 millones en 2020, y aunque en 2021 se diagnosticaron 6.4 millones de casos, estamos todavía muy por debajo de los niveles anteriores a la pandemia”. OMS.
Es importante destacar que el informe destaca que es la primera ocasión en muchos años que aumenta el número de personas que contraen la enfermedad y que están infectados por bacilos resistentes a los medicamentos, lo que parece estar relacionado con las múltiples y prolongadas interrupciones en los servicios de lucha contra la tuberculosis en 2021 asociadas a la pandemia.
“Este informe aporta nuevos datos de gran importancia y demuestra muy a las claras que es necesario aunar fuerzas y redoblar con urgencia los esfuerzos para reactivar la respuesta a la tuberculosis. Solo así podremos alcanzar los objetivos fijados y salvar vidas. El informe ayudará a los países, los asociados y la sociedad civil a conocer los progresos alcanzados y a preparar la segunda reunión de alto nivel de las Naciones Unidas sobre la tuberculosis que se ha de celebrar en 2023”. Dra. Tereza Kasaeva, Directora del Programa Mundial sobre Tuberculosis de la OMS.
Al respecto, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS, declaró: “Si algo hemos aprendido de la pandemia es que con solidaridad, determinación, innovación y un uso equitativo de las herramientas disponibles podemos superar graves amenazas para la salud. Debemos aplicar esas enseñanzas a la lucha contra la tuberculosis para poner fin a esta enfermedad que ha causado tantas muertes, pero solo podremos hacerlo si trabajamos unidos”.
“La reducción en el número notificado de diagnósticos de tuberculosis parece indicar que hay más casos no detectados y sin tratar, lo que da lugar a un incremento de las defunciones y de la transmisión extrahospitalaria de la infección y, con el tiempo, del número de enfermos”. OMS.
Algunos datos duros que han impulsado el crecimiento de la tuberculosis.
- Las múltiples y prolongadas interrupciones en los servicios de lucha contra la tuberculosis durante el 2021.
- 450 mil nuevos casos de tuberculosis resistente a la rifampicina.
- Los conflictos que afectan a Europa del Este, África y Oriente Medio han agravado aún más la situación de los grupos vulnerables.
- La reducción en el número notificado de diagnósticos, indica que hay más casos no detectados y sin tratar, lo que acarrea el incremento de las defunciones y de la transmisión extrahospitalaria de la infección.
- La reducción entre 2019 y 2020 del número de personas a quienes se trataba con medicamentos contra la tuberculosis resistente a la rifampicina y multirresistente. En 2021, se empezó a tratar solamente a 161 mil 746 personas con tuberculosis resistente a la rifampicina, es decir, solo a una de cada tres que lo necesitaban.
- El decremento del gasto mundial en servicios esenciales contra esta enfermedad, que pasó de $ 6 mil millones de dólares americanos en 2019, a $ 5 mil 400 millones en 2021, cifra sustancialmente inferior a la mitad de la meta mundial de 13 mil millones de dólares anuales prevista para 2022.
- Muchos de los nuevos casos de tuberculosis se atribuyen a cinco factores de riesgo: la desnutrición, la infección por el VIH, los trastornos por consumo de alcohol, el tabaquismo y la diabetes.
Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF.
Fuentes:
Organización Panamericana de la Salud. (27 de octubre del 2022).
Aumenta la morbimortalidad por tuberculosis durante la pandemia de COVID-19.
Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades. (13 de mayo del 2016).
Tuberculosis.