En diversas ocasiones previas hemos abordado el notorio incremento de los desórdenes mentales y emocionales que con mayor intensidad y recurrencia se están presentando durante el transcurso de la pandemia que estamos viviendo.
Trastorno de ansiedad generalizada (TAG), depresión, desarrollo de fobias, ideación suicida, autolesiones, extrema irritabilidad e intolerancia, consumo de alcohol, tabaco y enervantes, desórdenes del sueño, trastornos alimentarios, y muerte autoinflingida, son solamente algunas de las manifestaciones que el miedo, la incertidumbre por el futuro, la frustración, el aislamiento, y los largos periodos de convivencia en espacios no siempre adecuados para ello, están ocasionando en muchos de nosotros, sin que encontremos como canalizar positivamente estas emociones.
Una más de las posibles manifestaciones de los altos niveles de estrés que estamos sufriendo es la denominada “parálisis del sueño”, clasificada dentro del grupo de las parasomnias (Clasificación Internacional de Trastornos del Sueño), afección que ocasiona la pérdida transitoria de la movilidad y el habla al inicio del sueño o al despertar, lo que no impide que la persona que sufre un episodio de este tipo esté consciente de lo que le ocurre, ocasionándole mucha angustia.
“El ciclo normal del sueño tiene etapas, desde adormecimiento leve hasta el sueño profundo. Durante la etapa del movimiento ocular rápido (MOR), los ojos se mueven rápidamente y es común tener sueños vívidos. todas las noches las personas atraviesan varios ciclos de sueño MOR y no MOR. Durante el sueño MOR, el cuerpo está relajado y los músculos no se mueven. La parálisis del sueño se presenta durante el cambio de etapas del ciclo del sueño. Cuando despierta súbitamente del sueño MOR, el cerebro está despierto, pero el cuerpo aún está en modo MOR y no puede moverse, causando una sensación de estar paralizado”. MedlinePlus.
La parálisis del sueño no es provocada únicamente por altos niveles de estrés, ya que se le relaciona también con otros disparadores, entre los que podemos anotar, un descanso insuficiente y de baja calidad, sueño fragmentado, horarios irregulares de descanso (por ejemplo los ocasionados por trabajos nocturnos), y el uso de sustancias, factores que en muchas ocasiones están presentes actualmente en nuestras vidas, y otros más, como el síndrome del cambio rápido de zona horaria (jet lag), la privación de sueño y dormir boca arriba.
La parálisis del sueño ocurre durante la Fase REM del sueño, y no se le debe dar mayor importancia si se manifiesta como un síntoma aislado, aunque se viva con angustia. Durante un episodio típico de parálisis del sueño, las personas no pueden mover ninguna parte de su cuerpo, salvo los ojos y el diafragma al respirar, manteniendo la capacidad auditiva y táctil, lo que evidentemente es muy impactante. Pasados unos segundos o minutos, o si una persona toca a quien lo está sufriendo, desaparecerá sin dejar ninguna secuela.
En este contexto, vale la pena comentarles que nuestro cerebro pasa durante el sueño por ciclos con cinco fases distintivas: La quinta fase o sueño de movimientos oculares rápidos (REM por sus siglas en inglés), abarca el 25% del total del periodo de sueño, lo que ocurre por primera vez entre 70 y 90 minutos después de dormirse. Ya que los ciclos de sueño se repiten, se entra y sale del sueño REM varias veces durante la noche.
“La parálisis de los músculos voluntarios se asocia a un tipo especial de alucinaciones que reciben el nombre de alucinaciones hipnagógicas y pueden ser visuales, auditivas o táctiles. Se manifiestan viendo u oyendo objetos inexistentes o creyendo que una persona cercana se encuentra en las proximidades. Las alucinaciones hipnagógicas provocan en muchas ocasiones sensación de miedo o temor, especialmente cuando el sujeto experimenta el primer episodio”. Wikipedia.
Cerramos la nota, destacando que los episodios de parálisis del sueño pueden ser inquietantes, y en algunos casos ser un síntoma referencial de narcolepsia, pero por si mismos no representan ningún peligro, y rara vez requieren tratamiento médico. Duran desde algunos segundos hasta 1 o 2 minutos, concluyendo espontáneamente, o cuando se toca o mueve a la persona.
Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF.
Fuentes:
MedlinePlus. (26 de noviembre del 2020).
Parálisis del sueño.
Instituto del sueño. (26 de noviembre del 2020).
Parasomnias.
Institutos Nacionales de Salud. (26 de noviembre del 2020).
¿Qué es el sueño REM?
códigoF. (26 de noviembre del 2020).
La pandemia está llevando al desarrollo acelerado de múltiples patologías y desórdenes mentales..