“La resistencia a los antimicrobianos es como una pandemia a cámara lenta. Debemos unirnos para hacer frente a esta amenaza mundial. Es un enemigo letal y silencioso, y por eso debemos prestarle más atención”. Mia Mottley, Primera Ministra de Barbados

No deja de ser preocupante el saber que desde hace más de 50 años no había sido lanzado al mercado un nuevo antibiótico capaz de enfrentar con solvencia a las llamadas súper bacterias, las que cada año ocasionan la muerte anticipada de alrededor de un millón de personas a nivel global como consecuencia de alguna infección que no puede ser controlada con los antibióticos que constituyen el actual arsenal terapéutico que tienen a su disposición los médicos.

Entre todas las bacterias farmacorresistentes que amenazan la salud y expectativa de vida de los seres vivos, es necesario destacar a una particularmente peligrosa, la Acinetobacter baumannii, un cocobacilo gramnegativo resistente a los carbapenémicos (antibióticos betalactámicos de amplio espectro, capaces de combatir a las bacterias Gram positivas y gram negativas), pero que cada vez acusan mayores limitaciones frente a los patógenos responsables de múltiples infecciones de gran severidad.

“El tratamiento eficaz de las infecciones bacterianas es la base de la atención sanitaria moderna, y permite tecnologías médicas como los trasplantes, la quimioterapia contra el cáncer y la cirugía. El aumento de bacterias resistentes a los antibióticos representa una pandemia silenciosa y está erosionando la seguridad de estas intervenciones médicas básicas, y es una causa creciente de mortalidad a nivel mundial”. Nature. A novel antibiotic class targeting the lipopolysaccharide transporter

La buena noticia es que un equipo de investigadores del laboratorio farmacéutico Roche desarrolló un nuevo tipo de antibiótico bautizado con el nombre de Zosurabalpina, mismo que superó los mecanismos de resistencia a los antibióticos de la Acinetobacter baumannii in vitro, y también en modelos de infección en ratones de laboratorio, lo que les permitió, además, identificar un nuevo objetivo de ataque contra las bacterias, potencialmente eficaz para el desarrollo de otros fármacos antimicrobianos.

“La resistencia a los antimicrobianos es una emergencia para la salud mundial que comprometerá gravemente el avance de la medicina moderna. Hay una necesidad urgente de aumentar la inversión en investigación y desarrollo para luchar contra las infecciones resistentes a los antibióticos, entre ellas la tuberculosis. De otro modo, volveremos a los tiempos en los que la gente temía contraer infecciones habituales y ponía en riesgo su vida si se sometía a intervenciones quirúrgicas sencillas”. Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud

Es imprescindible mencionar que la lista de patógenos prioritarios elaborada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), específicamente en la sección denominada “Prioridad 1: CRÍTICA”, está encabezada por la Acinetobacter baumannii, considerada como uno de los seis microorganismos Gram-negativos multirresistentes a nivel mundial más importantes, responsable de múltiples infecciones, principalmente nosocomiales, que afectan seriamente a pulmones y sangre, ocasionando muchas infecciones posquirúrgicas.

Buscando incentivar la I+D de nuevos antibióticos que solucionen el acuciante problema de las farmacorresistencias, la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), y la Comunidad Europea han implementado diversos programas para rentabilizar un ámbito investigativo que se caracteriza por tener un difícil retorno financiero, confiando que con estos apoyos se conseguirá incrementar esas actividades.

“Es importante anotar que la OCDE considera que las líneas de investigación y desarrollo actuales para las nuevas terapias antimicrobianas se ha ido debilitando por tres razones principales: los nuevos desafíos científicos, la alta incertidumbre y los bajos ingresos, lo que provoca que la búsqueda de nuevos antibióticos resulte poco atractiva, y aunque en los últimos años se han puesto en marcha varias iniciativas e incentivos financieros adicionales, los mismos no han tenido los alcances suficientes , por lo que propone que sea el Grupo de los 20 (G20) el que a través de tres ejes de acción impulse y fortalezca la investigación de nuevos antibióticos”.

Aún queda un largo camino que recorrer para confirmar la capacidad antibiótica de la Zosurabalpina contra la Acinetobacter baumannii, determinar con absoluta precisión la dosis de administración, y conocer con certeza los potenciales efectos adversos, pero, hasta el momento, los resultados obtenidos en roedores de laboratorio y 129 aislados clínicos humanos del patógeno, derivados de una variedad de sitios de infección, y el descubrimiento de una nueva diana para atacar a ésta y otras bacterias, son altamente prometedores.

Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF

Fuentes:

Nature. (3 de enero de 2024).
A novel antibiotic class targeting the lipopolysaccharide transporter

Elsevier. (Marzo de 2000).
Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica

Organización Panamericana de la Salud. (4 de marzo de 2021).
Patógenos multirresistentes que son prioritarios para la OMS

códigoF. (25 de enero de 2022).
Para 2050, las superbacterias causarán la muerte de 10 millones de personas por año

códigoF. (14 de agosto de 2017).
El plan de acción de la OCDE para fortalecer e impulsar las actividades de I+D en contra de las “súper bacterias”