Un estudio recientemente publicado en la revista Science Translational Medicine, con el título “That silent alliance: HIV and smoke promote lung diseases» firmado por Leopoldo N. Segal, miembro de la División de Medicina Pulmonar y Cuidados Críticos de la Escuela Universitaria de Medicina de New York. EE.UU., demostró en primates no humanos los efectos independientes y sinérgicos del VIH y el tabaquismo para el desarrollo de bronquitis crónica.
El investigador comenta que es bien sabido por los especialistas que los pulmones son un importante reservorio para el VIH, independientemente de que se haya alcanzado una adecuada reconstitución inmunológica y la presencia del virus en sangre esté controlada con terapia antirretroviral (TAR).
Segal destaca en el texto del artículo, que los datos epidemiológicos de las personas infectadas con VIH sugieren que está infección se asocia de manera independiente con el desarrollo de enfermedades pulmonares obstructivas crónicas (EPOC), lo que ha conducido a que los trastornos pulmonares se hayan convirtiendo en una importante carga de atención médica para este grupo de pacientes.
Los resultados de la investigación realizada en macacos expuestos al humo del tabaco e infectados con una variante del VIH humano, denominada SHIV, mostraron que la exposición al humo del cigarrillo casi duplicó la cantidad de células epiteliales gp120+ en las vías respiratorias pequeñas y en las células de los alvéolos, lo que sugiere que el humo del cigarrillo promueve la replicación del VIH dentro de las células epiteliales o inhibe la eliminación de las células epiteliales gp120+.
La exposición directa o indirecta de las personas infectadas con el VIH aumenta el ARNm de MUC5AC, una mucina (sustancia gelatinosa, pegajosa o resbaladiza formada por complejos de glúcidos y proteínas, que se encuentran en las mucosas o en las secreciones salivares y actúan como lubricantes o cementantes) secretora de las vías aéreas principales que sirve como marcador para la producción de mucosidad de las vías respiratorias y la enfermedad pulmonar obstructiva.
Además, la infección por SHIV (el VIH de primates no humanos) y la exposición al humo del tabaco promueven decididamente el incremento de MUC5AC y la metaplasia (Transformación de un tejido vivo en otro de estructura y función diferentes) y la hiperplasia (Multiplicación excesiva de células normales en un tejido o en un órgano) de las células caliciformes (Células glandulares, o glándulas unicelulares secretoras de mucus, presentes en los revestimientos epiteliales de las mucosas de las vías respiratorias y el aparato digestivo).
También establecieron que tanto el tabaquismo como el SHIV disminuyen los marcadores de las uniones estrechas de las células epiteliales bronquiales, inducen fuertes limitaciones en el flujo de aire y generan severos cambios estructurales en las vías aéreas centrales.
Los investigadores concluyen que independientemente del tabaquismo y aún de manera más severa si la persona infectada con VIH se expone directa o indirectamente al humo de tabaco, la infección promoverá cambios inflamatorios y estructurales en los pulmones que progresivamente los llevaran a trastornos inflamatorios crónicos del pulmón.
Fuente:
Science Translational Medicine. That silent alliance: HIV and smoke promote lung diseases, firmado por Leopoldo N. Segal. Leopoldo N. Segal. Science Translational Medicine 24 Oct 2018: Vol. 10, Issue 464, eaav3893, DOI: 10.1126/scitranslmed.aav3893