El Mieloma Múltiple (MM), un tipo de cáncer de la sangre que afecta las células plasmáticas de la médula ósea, está dejando de ser una sentencia de muerte para convertirse en una enfermedad crónica y controlable en México, gracias a los avances en su diagnóstico y tratamiento.
Esta patología, que compromete funciones vitales como la producción de sangre y la estructura ósea, ha experimentado una transformación en su pronóstico. «Con las terapias actuales, los resultados son tan alentadores que ya hablamos de una enfermedad crónica, similar a la hipertensión o la diabetes», aseguró la médica hemato oncóloga, Yanet Ventura. Este nuevo panorama ofrece una calidad de vida significativamente mejorada a los pacientes.
El Desafío del Diagnóstico Tardío
A pesar del progreso terapéutico, el camino hacia la detección oportuna es el principal reto. Los síntomas iniciales del mieloma son a menudo difusos y se confunden con otras condiciones: dolor óseo persistente, fatiga o fracturas inesperadas.
Una «fractura patológica» —aquella que ocurre sin un golpe o esfuerzo significativo, como al practicar un movimiento ligero— es con frecuencia el primer indicio. El proceso diagnóstico puede demorar meses, incluso años, lo que agrava las complicaciones físicas y emocionales. Jimena Alcalá, presidenta de la Asociación Mexicana de Enfermos de Mieloma Múltiple (AMEMM), señaló que algunos pacientes «pasan hasta un año antes de saber qué tienen, después de sufrir fracturas, pérdida de movilidad o dolor intenso».
Cambio en el Perfil del Paciente y la Clave de la Detección
Tradicionalmente, el MM se diagnosticaba en personas mayores de 60 años. Sin embargo, los especialistas alertan sobre un cambio en el perfil, con casos cada vez más frecuentes en adultos jóvenes, incluso en pacientes de 30 o 40 años, lo que implica un mayor impacto social y económico al tratarse de población en edad productiva.
Ante este panorama, la detección temprana se posiciona como la clave para salvar vidas. Médicos y asociaciones civiles coinciden en promover estudios de sangre de rutina al menos una vez al año, pues un simple examen puede alertar sobre alteraciones. «Detectado a tiempo, el cáncer puede ser curable… Si el mieloma se identifica en etapas tempranas, el paciente puede acceder a tratamientos menos invasivos, con menos dolor y mejor calidad de vida», subrayó una representante de asociaciones.
Urge Igualdad y Atención Integral
Persiste una marcada desigualdad en el acceso a las terapias de última generación entre las distintas instituciones de salud en México. Mientras en el sector privado los costos son prohibitivos, en algunos hospitales públicos el acceso a los fármacos combinados, considerados el «estándar de oro», es limitado, marcando una diferencia crucial en el pronóstico de los pacientes.
Además del tratamiento farmacológico, los expertos claman por un enfoque integral. Áreas como la fisioterapia oncológica, la psicología y la nutrición clínica son esenciales para la rehabilitación y para contrarrestar la pérdida de masa muscular y autonomía derivada del miedo a las fracturas. Sin embargo, en México existe un déficit de especialistas en estas disciplinas.
El mieloma múltiple sigue siendo un reto. La Dra. Ventura concluye con un llamado a la acción: «Necesitamos reducir las brechas de acceso, formar más médicos especializados y garantizar la atención integral… Conocer el mieloma, reconocer sus síntomas y fomentar el diagnóstico temprano puede marcar la diferencia entre la incertidumbre y la esperanza.«
Por: Andrea Landeros


