El cáncer infantil se mantiene como una de las principales causas de muerte prematura en la infancia y la adolescencia, impulsado por su detección tardía y el abasto insuficiente de tratamientos de calidad, seguridad y eficacia comprobadas
El pasado 15 de febrero celebramos el Día Mundial contra el Cáncer Infantil, una de las principales causas de muerte de niños y adolescentes en el mundo, pero sobre todo en América Latina y el Caribe, zonas geográficas en las que la detección temprana del cáncer entre los 0 y los 19 años continúa siendo una asignatura pendiente de aprobar.
La demora en el diagnóstico del cáncer permite que la enfermedad se desarrolle y haga metástasis, disminuyendo drásticamente las posibilidades de alcanzar el éxito terapéutico, sobre todo cuando ésta se suma a la carencia total o parcial de los medicamentos de calidad, seguridad y eficacia probada que deben ser suministrados de manera ininterrumpida, para tratar de vencer a este enemigo tan formidable.
Los datos duros que respaldan la aseveración recién hecha no dejan lugar a dudas sobre la necesidad de mejorar en el menor tiempo posible los diagnósticos tempranos en este grupo etario, ya que aproximadamente 30 mil niños, niñas y adolescentes en LATAM son y serán diagnosticados con cáncer anualmente, de los que aproximadamente una tercera parte perderán la vida durante el mismo periodo; sin embargo, esta enfermedad, diagnosticada prematuramente y correctamente tratada, tiene buenas posibilidades de éxito.
Mientras que en los países de ingresos altos de la región de las Américas y del resto del mundo más del 80% de los niños con cáncer se curan, en las naciones de medios y bajos ingresos, como el nuestro, el promedio de supervivencia se ubica entre el 40 y el 55%, una desproporción a todas luces injustificable.
Buscando incrementar sustancialmente el número, la precisión y la oportunidad de los diagnósticos de los diferentes tipos de cáncer que asolan específicamente a niños y adolescentes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó la Guía interactiva de referencia rápida para el diagnóstico precoz del cáncer en niños, niñas y adolescentes, sobre la que el doctor Mauricio Maza, asesor regional en cáncer de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), declaró: “La detección temprana no solo aumenta las probabilidades de curación, sino que también mejora significativamente la calidad de vida de los pacientes y sus familias. Con esta nueva herramienta, buscamos dotar a los equipos de salud de las herramientas necesarias para actuar con rapidez y eficacia”.
La OMS colabora con más de 100 asociados mundiales a través de la Iniciativa mundial sobre el cáncer infantil, buscando ayudar a los gobiernos a crear centros oncológicos de alta calidad y satélites regionales que garanticen un diagnóstico temprano y preciso y tratamientos eficaces para los niños con cáncer, entre los que destaca el St. Jude Children’s Research Hospital, líder en la comprensión, el tratamiento y la cura del cáncer infantil, la anemia falciforme y otros trastornos potencialmente mortales.
Algunos datos importantes sobre el cáncer infantil y adolescente
- El cáncer es una de las principales causas de mortalidad entre niños y adolescentes en todo el mundo. Anualmente son diagnosticados con cáncer entre 280 mil 300 mil niños de entre 0 y 19 años.
- En LATAM, aproximadamente 30 mil niñas, niños y adolescentes menores de 19 años son afectados anualmente por esta enfermedad, de los que cerca del 30% fallecerán.
- Entre los diferentes tipos de cáncer infantil y adolescente, los más frecuentes son la Leucemia linfoblástica aguda, el Linfoma de Burkitt, el Linfoma de Hodgkin, el Tumor de Wilms, la Retinoblastoma, el Glioma de bajo grado (tumor cerebral).
- Los seis tipos de cáncer que se presentan con mayor frecuencia en niños y adolescentes son altamente curables, siempre y cuando se diagnostiquen oportuna y correctamente, y se traten correctamente, y sin interrupciones.
- En los países de ingresos altos, más del 80 % de los niños afectados de cáncer se curan, pero en muchos países de ingresos medianos y bajos la tasa de curación baja hasta el 20 %.
- Las defunciones evitables debidas a los cánceres infantiles en los países de ingresos medianos y bajos se producen por la falta de diagnóstico, los diagnósticos erróneos o tardíos, las dificultades para acceder oportuna y libremente a la atención sanitaria, el abandono del tratamiento, la muerte por toxicidad, y las mayores tasas de recidivas.
- El profundo impacto del cáncer infantil se traduce en años de vida perdidos, en mayor desigualdad, en dificultades económicas y en un sufrimiento del que es difícil recuperarse.
Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF
Fuentes:
Organización Mundial de la Salud. (11 de febrero de 2025).
La OMS y St. Jude lanzan un innovador programa internacional de distribución de medicamentos contra el cáncer infantil.
códigoF. (17 de febrero de 2025).
Día Mundial contra el Cáncer Infantil 2025.