“Vacunar a las poblaciones en todas las partes del mundo, y no solo a las de los países de altos ingresos, es fundamental si vamos a establecer la inmunidad colectiva y contener la propagación del COVID-19” Peter Palese. Profesor y presidente del Departamento de Microbiología de la Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai en la ciudad de Nueva York, EE. UU., y experto en el campo de los virus de ARN.
Entre otras limitantes que impiden el avance rápido de los programas y estrategias de vacunación en múltiples países, están la disponibilidad y el precio de las vacunas, situación que en algunos casos se torna un problema de compleja solución.
Es por ello que muchos científicos en todo el orbe siguen avanzando en la búsqueda de alternativas vacunales de rápida producción y bajo costo, lo que eventualmente permitirá solventar esta situación.
En este contexto, les compartimos que un equipo de investigadores de la Facultad de Medicina Icahn en Mount Sinai, EE .UU., desarrollaron una vacuna para evitar el contagio por SARS-COV-2 de bajo costo, cuya ventaja es la de poder ser fabricada dentro y fuera de los Estados Unidos, utilizando la infraestructura existente para la fabricación del virus de la influenza, lo que facilitaría la fabricación de millones de dosis vacunales en el corto plazo.
Al respecto, el doctor Peter Palese, MD y Horace W. Goldsmith, profesor y Presidente de Microbiología en Icahn Mount Sinai y autor principal de dos estudios que examinan los efectos de las llamadas vacunas contra el virus de la enfermedad de Newcastle (NDV) en modelos animales, comentó: “Para contener la propagación del virus en todo el mundo, se necesita con urgencia una vacuna que sea efectiva y rentable, especialmente en países de ingresos bajos y medios con recursos limitados. Nuestro trabajo sugiere que una vacuna basada en NDV, que se puede producir a partir de huevos de gallina embrionados, sería una forma segura y altamente escalable de satisfacer las vastas demandas del mercado mundial de vacunas”.
La vacuna desarrollada por Mount Sinai funciona esencialmente de la misma manera que muchas vacunas contra la influenza, introduciendo la proteína del pico del SARS-CoV-2 en el organismo a través del virus NDV inofensivo, lo que hace que las células del cuerpo produzcan copias de la proteína de pico, impulsando al sistema inmunológico a generar anticuerpos y células T específicos contra dicha proteína, neutralizando a cualquier intruso que lo contenga, como el SARS-CoV-2.
Aunada a esta buena noticia, gracias a un acuerdo de licencia entre Mount Sinai y el Laboratorio Avi-Mex S.A. de C.V. (Avimex), una empresa farmacéutica veterinaria mexicana, se iniciarán en nuestro país los ensayos clínicos de fase 1 en humanos de la vacuna. La colaboración entre Avimex y Monte Sinai en el desarrollo de vacunas veterinarias contra la influenza se remonta a 2003, fecha desde la que ha producido millones de dosis basadas en la plataforma de vectores NDV.
Avimex® es una empresa privada de capital 100% mexicano, fundada en 1952, enfocada prioritariamente en la investigación, desarrollo, manufactura, importación, exportación y comercialización de productos biológicos, farmacéuticos, desinfectantes y detoxificantes de micotoxinas para la salud animal.
Algunas características particulares de la vacuna de Monte Sinaí.
- Los anticuerpos neutralizantes producidos por la vacuna NDV han demostrado ofrecer una fuerte protección en modelos animales contra la infección por SARS-CoV-2.
- Ya que el NDV no es un patógeno humano, el antígeno de pico se administra de manera más eficiente y sin verse comprometido por ninguna inmunidad preexistente en humanos.
- Las vacunas basadas en NDV se han probado ampliamente en ensayos en humanos, con muy buen historial de seguridad.
- Gracias al uso de la tecnología y la infraestructura existentes, este fármaco podría ayudar a materializar las metas de vacunación global en un período muy corto.