La secuenciación genética de los virus, y su posterior análisis, permiten conocer su evolución, sus variantes, y su dispersión geográfica y temporal, lo que facilita la identificación de los cambios que podrían modificar el comportamiento del patógeno, e implementar las herramientas y medidas de salud necesarias.

Entre todo el sufrimiento y las irrecuperables pérdidas que esta larga pandemia nos está ocasionando, y que parece no tener fin, al menos a corto plazo, creemos necesario implementar a la mayor celeridad posible las acciones que corrijan las carencias, deficiencias y debilidades de las organizaciones mundiales de salud; la modernización, fortalecimiento, capacidad y calidad de respuesta e integración de los sistemas sanitarios nacionales; así como la construcción de una sólida conciencia global de solidaridad que no excluya a ningún país, sin importar su nivel de ingresos.

En este contexto, y buscando fortalecer la vigilancia genómica en la región de las Américas, el Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (ICGES) de Panamá, la Fundación Oswaldo Cruz (FIOCRUZ) de Brasil, y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), organizaron el Curso de Evolución Viral y Epidemiología Molecular (VEME, por sus siglas en inglés), llevado a cabo en la Ciudad del Saber en la República de Panamá, evento que durante seis días, tuvo la participación de los representantes de 17 laboratorios de salud pública de la región, cientos de personas interesadas en todo el mundo, y cerca de 50 expertos en bioinformática de instituciones científicas reconocidas de 15 países, los que fungieron como capacitadores.

“La secuenciación genómica es un proceso que determina el orden o la secuencia de los nucleótidos (p. ej., A, C, G y T/U) en cada uno de los genes presentes en el genoma del virus. Los nucleótidos son moléculas orgánicas que forman el bloque estructural de los ácidos nucleicos, como ARN o ADN. La secuenciación completa del genoma puede revelar la secuencia de alrededor de 13 mil 500 letras de todos los genes del genoma del virus”. Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE. UU.

Al respecto, Jairo Méndez, asesor en enfermedades virales emergentes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), declaró: “Estudiar la evolución de los virus es clave para detectar mutaciones o variantes que puedan modificar la tasa de transmisión o la gravedad de un patógeno y afectar la utilidad de las pruebas diagnósticas, vacunas y tratamientos. Esto es algo que hemos experimentado con el SARS-CoV-2, por lo que debemos profundizar la vigilancia genómica para cualquier virus emergente o reemergente”.

Vale la pena aclarar que a partir del inicio de la pandemia de COVID-19, la capacidad de secuenciación para vigilar al SARS-CoV-2 y sus variantes, se amplió en la región con apoyo de la OPS y la Red Regional de Vigilancia Genómica de COVID-19 (COVIGEN), integrada por los laboratorios de más de 20 países de las Américas, la que ha realizado hasta el momento más de 426 mil secuencias de SARS-CoV-2 en América Latina y el Caribe.

Laboratorios Regionales de Secuenciación: Fundação Oswaldo Cruz – Brasil; Instituto de Salud Pública de Chile – Chile; Instituto Nacional de Salud – Colombia; Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud – Costa Rica; Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos – México; Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud- Panamá; University of the West Indies – Trinidad y Tobago; Centers for Disease Control and Prevention – Estados Unidos de la América.

La Red Regional de Vigilancia Genómica COVID-19 se creó en 2020 para fortalecer la capacidad de secuenciación de los laboratorios participantes, pero también para estimular a los países que la conforman, a implementar y considerar a la vigilancia genómica de rutina como una estrategia que permita incrementar la cantidad de datos de secuenciación disponibles a nivel global, elemento crítico y esencial para mejorar el desarrollo de protocolos de diagnóstico, generar información para el desarrollo de vacunas, y entender mejor los patrones de evolución y epidemiología molecular de SARS-CoV-2.

Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF.

Fuentes:

Organización Panamericana de la Salud. (26 de agosto del 2022).
La OPS refuerza la vigilancia genómica en las Américas.

Red Regional de Vigilancia Genómica de COVID-19. (s.f.).
Secuenciando SARS-CoV-2 en las Américas.

Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. (2 de noviembre del 2021).
Secuenciación genómica y caracterización genética del virus de la influenza.