Con la clonación exitosa de un par de primates del género de los macacos, utilizando la misma técnica que en 1996 desarrollaron los científicos Ian Wilmut y Keith Campbell del Instituto Roslin de Edimburgo (Escocia) para la creación de la oveja Dolly, la ciencia se aproxima paso a paso a la posibilidad de clonar seres humanos.

Entendemos que esta aseveración es muy fuerte, pero el éxito alcanzado por un equipo de científicos chinos, encabezados por Zhen Liu y Yihun Lai, miembros del Instituto de Neurociencias y del Centro CAS para la Excelencia en Ciencias del Cerebro y Tecnología de Inteligencia de China, entre otras prestigiosas instituciones de ese país, podría apuntar potencialmente en esa dirección, aunque los responsables del estudio aseguran que no tienen intención alguna de hacerlo.

Los resultados fueron publicados en la prestigiosa revista Cell, bajo el título “Cloning of Macaque Monkeys by Somatic Cell Nuclear Transfer” (Clonación de monos macacos por transferencia nuclear de células somáticas), es la primera ocasión en la que se logra con éxito la clonación de primates aparentemente sanos, especie que más allá de cualquier otra consideración, está más próxima a nosotros, los seres humanos.

Después de Dolly, y antes de esta dupla de macacos recién creada, cuyos nombres son Zhong Zhong y Hua Hua, que sumados forman la palabra Zhonghua, que significa “Nación China”, ya habían sido clonadas 23 especies de mamíferos, entre los que podemos mencionar: ratones (1998); ganado (1998); cerdos (2000); gatos (2002); ratas (2003) y perros (2005).

Los autores del estudio mencionan que la clonación de primates es ideal para el desarrollo de futuras investigaciones, ya que al ser la especie más cercana a los humanos, son modelos animales ideales para el estudio de funciones fisiológicas únicas de los primates, lo que posibilitaría el desarrollo de tratamientos terapéuticos específicos para enfermedades humanas.

No cabe duda que más allá de la admiración por el resultado obtenido por este equipo de investigadores, la clonación de estos primates resulta un tanto escalofriante, al abrirse la posibilidad, muchas veces abordada en textos y películas de ciencia ficción o ciencia de anticipación, de crear “copias” exactas de nosotros mismos, ya sea para utilizar algunos de sus órganos como “refacciones” o tratar de eternizarnos a través de la clonación.

“No hay barreras para clonar primates, por lo que la clonación de humanos está más cerca de hacerse realidad”, aunque cuestionado por ello precisó: “En cualquier caso, nuestro objetivo es producir primates no humanos para investigación, no tenemos ninguna intención de extender esta investigación a personas, la sociedad no lo permitiría”
Mu-Ming Poo, director del Instituto de Neurociencias de Shanghái.
Sin embargo, hay que mencionar que las posibilidades de “producir” una gran cantidad de primates idénticos, destinados a la realización de investigación clínica aún tiene mucho camino por recorrer, ya que de 109 embriones transferidos, los investigadores consiguieron seis embarazos, de los que solamente dos llegaron a término.

Los investigadores buscarán perfeccionar su técnica de clonación, con el objetivo de clonar también chimpancés, orangutanes y gorilas, lo que según ellos, podría ayudar a preservar algunas especies que se encuentran en peligro de extinción.

Hoy nos quedamos con los resultados obtenidos con la clonación de Zhong Zhong y Hua Hua, atentos a nuevas noticias en este complejo y cuestionable ámbito del quehacer científico.

Fuentes:

Cell. | Cloning of Macaque Monkeys by Somatic Cell Nuclear Transfer.

Diario El País. | Científicos chinos crean los primeros monos clonados con la técnica de la oveja ‘Dolly’. Nuño Domínguez.