Los síntomas provocados por el síndrome postvacacional suelen desaparecer en aproximadamente dos semanas, pero si se prolongan o se agravan, probablemente requieran tratamiento especializado.
¿Disfrutó de un periodo vacacional? ¡Felicidades!, pero entérese que, cuanto más prolongado y satisfactorio haya sido, es posible que tenga mayores dificultades para reintegrarse fácilmente a sus actividades cotidianas prevacacionales sin sufrir un poco por ello.
El término usado para definir a esta situación es “síndrome postvacacional”, y generalmente se acentúa en quienes tienen una actividad cotidiana poco satisfactoria y muy exigente en ambientes laborales estresantes.
El síndrome postvacacional provoca síntomas físicos y emocionales entre los que destacan el cansancio generalizado, fatiga, alteración del sueño, dolores musculares, falta de apetito o de concentración, irritabilidad, tristeza, falta de interés, nerviosismo, los que, en suma, conducen a provocar un bajo rendimiento, y que aproximadamente duran alrededor de dos semanas.
“Un trabajo muchas veces impersonal, frustrante, rutinario, que impide el desarrollo personal, la autorrealización y un estilo de vida más armonioso, saludable y social. Naturalmente muchas de estas personas que se reincorporan a su trabajo van a necesitar ayuda psicológica y/o médica, sobre todo cuando los síntomas (irritabilidad, depresión, molestias psicosomáticas, fatiga, anhedonia, depresión anérgica, etc.) presentan una gran intensidad y persistencia en el tiempo. Asimismo, la incertidumbre en su puesto de trabajo, la frustración laboral y la falta de expectativas conducen a numerosos trastornos psicosomáticos”. Elsevier
¿Qué podemos hacer para disminuir el impacto del síndrome postvacacional?
- No prolongar las vacaciones hasta un día antes de reintegrarnos a las actividades cotidianas.
- Recuperar nuestro horarios y hábitos de descanso y alimentación antes de regresar a trabajar.
- Esforzarnos por asumir una actitud positiva frente al término de las vacaciones y el regreso a la cotidianeidad.
- Mantengamos nuestra área de trabajo ordenada y limpia, asegurándonos de que estén localizables y a la mano todos los elementos necesarios para desarrollarlo, evitando perder tiempo, y sufrir enojos y frustraciones.
- Disfrutemos intervalos de descanso durante nuestra jornada laboral.