¿Qué tan grave es la sexta ola pandémica en nuestro país?

Sin lugar a dudas, sabemos que contar con información fidedigna, mensurable y oportuna es un elemento básico para poder evaluar el estatus que guarda la pandemia de COVID-19 a nivel global, pero particularmente en nuestro país.

Hace aproximadamente tres meses y medio, la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP) dejó de proporcionar información actualizada sobre el número de pruebas para el diagnóstico de COVID-19 que se están aplicando, así como las cifras de positividad, datos que anteriormente podían encontrarse en el portal de Datos Abiertos, y cuya ausencia coincide con la suspensión de las medidas precautorias destinadas a disminuir el número de contagios, lo que lleva a hacer creer a muchas personas, que la pandemia ha terminado, o ya no es peligrosa, lo que es totalmente erróneo.

“El Comité de Emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), reconoció que muchas políticas nacionales de COVID-19 reflejan la percepción de que la emergencia puede haber terminado, y que los gobiernos, los trabajadores de la salud y las sociedades en general están experimentando <fatiga de COVID-19>. Por lo tanto, el Comité enfatizó la necesidad de mejorar la escucha social y la participación de la comunidad como medios para adaptar mejor las comunicaciones de riesgos y contextualizar las políticas, lo que ayudará a las personas a continuar tomando las medidas necesarias para proteger su salud”. OMS.

Para ser más precisos, les informamos que el último reporte que actualizó la Agencia Digital de Innovación Pública ADIP fue el 13 de agosto de este año, cuando las cifras correspondientes los contagios y muertes en la quinta ola de COVID-19 estaban a la baja

“Es grave la falta de información al respecto, debido a que la gente piensa que no hay casos, y que no es importante hacerse pruebas, lo que a su vez favorece el incremento de casos”. Jessica Valencia, neumóloga.

Por otra parte, e inmersos en la estación fría del año, en la que comúnmente se presentan el mayor número de casos de infecciones respiratorias recurrentes, y ahora también el COVID-19, los especialistas hacen notar que cabe la posibilidad de que con el regreso de los connacionales que viajaron a Qatar para disfrutar del mundial de futbol; la realización de eventos de concurrencia masiva, y las fiestas decembrinas, se acreciente el número de nuevos contagios de enfermedades respiratorias, por lo que es imprescindible que aquellos que presenten signos y síntomas aparentemente relacionados con una afección respiratoria,  acudan lo antes posible a realizarse una prueba, y a consulta médica para ser diagnosticados, y atendidos.

“Las reuniones masivas, como los eventos deportivos y los festivales, crean las condiciones ideales para la transmisión de persona a persona de una variedad de enfermedades infecciosas, que pueden propagarse rápidamente a nivel mundial debido a la facilidad de los viajes. En Qatar se llevan a cabo dos reuniones masivas simultáneamente, el campeonato de la Copa Mundial de la FIFA 2022 y el festival del concurso de belleza de camellos del Qatar Camel Mazayen Club. Estos han atraído a cientos de miles de personas de Oriente Medio y de todo el mundo. Muchos asisten a ambos eventos, interactuando estrechamente entre ellos y con los camellos, creando las condiciones ideales para la transmisión de patógenos zoonóticos asociados a los camellos con potencial epidémico. Estos patógenos incluyen el altamente letal MERS-CoV. Los camellos dromedarios en el Medio Oriente son un importante reservorio de MERS-CoV. Los humanos se infectan esporádicamente a través del contacto directo o indirecto con camellos o productos lácteos de camellos infectados con MERS-CoV”. The Lancet Global Health.

Nos parece indispensable que nuestro gobierno mantenga una comunicación, abierta, precisa y transparente sobre la situación actual de la sexta ola de COVID-19, para que no bajemos la guardia ni cantemos victoria antes de tiempo, manteniendo las medidas sanitarias que nos ayuden a disminuir el número de posibles contagios de enfermedades respiratorias, y con ello salvar vidas.