Es probable que la mayoría de las personas que hayamos escuchado la palabra tanatología la relacionáramos con la ocurrencia de enfermedades terminales y muerte, y la forma para enfrentarlas de la mejor manera posible. Lo cierto es que el enfoque moderno de la tanatología como instrumento científico para la sanación abarca todos los tipos de pérdidas que nos llevan a vivir un duelo, auxiliándonos con sus herramientas y recursos terapéuticos a darles un nuevo significado, o resignificarlas, para asumir la pérdida y seguir adelante con nuestras vidas.

“La tanatología fue aceptada como ciencia a partir de los años 50’s. Desde su concepción y hasta la actualidad, se ha tratado a la tanatología de manera interdisciplinaria e incluye la evaluación de nuestra relación con la muerte, y no tanto con las especulaciones o creencias (religiosas, culturales o de otra índole). La meta última del tanatólogo es orientar al enfermo hacia la aceptación de su realidad, aceptación que se traduce en esperanza sobre la situación real. Esto incluye una mejor calidad de vida, una muerte digna y en paz”.  Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”

En el contexto de la salud en nuestro país, el Instituto Mexicano de Tanatología, una asociación civil no lucrativa, no gubernamental ni religiosa, creada hace más de 20 años, y soportada por los donativos de sus afiliados y cuotas de recuperación, y sus egresados, adquieren un rol relevante en nuestro ámbito social, teniendo como objetivo principal el de preparar a las personas de forma integral y multidisciplinariamente, entendiendo al ser humano como una unidad bio-psico-social indivisible con necesidades espirituales, para enfrentar cualquier tipo de pérdida, incluida su propia muerte, la de sus seres queridos, y las personas con las que se relaciona en su trabajo. Dicho objetivo es, sin lugar a dudas, ambicioso y por momentos complejo, pero, en el seno de una sociedad cada vez menos capacitada para enfrentar las pérdidas, adquiere una importancia esencial.

¿Qué es el duelo?

El duelo es el estado de pensamiento, sentimiento y actividad que ocurre ante cualquier pérdida significativa, y se manifiesta con síntomas físicos y emocionales dolorosos, en ocasiones, difíciles de superar sin ayuda.

La psiquiatra Elisabeth Kübler-Ross (8 de julio de 1926 – 24 de agosto de 2004), una de las grandes especialistas en tanatología, describió el proceso de duelo en cinco etapas, y, aunque originalmente las aplicó exclusivamente a las personas con enfermedades terminales, posteriormente las extrapoló a cualquier tipo de pérdida, como el empleo, un proyecto comercial, ingresos, estatus, libertad, pareja, drogodependencia, o un diagnóstico de infertilidad, por mencionar solamente algunos de ellos.

Vale la pena aclarar que estas etapas no siempre se dan en el orden en el que las encontrará en esta nota, ni todas son experimentadas forzosamente por todos los individuos. El proceso de duelo es personal, e idealmente no debe ser acelerado ni alargado por motivos de opinión o creencias de una persona. Sin embargo, es necesario considerar que cada una de las etapas serán dejadas atrás, y la aceptación llegará.

  1. Negación: La negación es solamente una defensa temporal para el individuo. Representada por frases como «me siento bien», «esto no me puede estar pasando», «no a mí», etc.
  2. Ira o enojo: El enfermo se rebela contra la realidad, y frecuentemente se pregunta «¿por qué a mí?». Todo le molesta, todo le incomoda, nada le parece bien. Recordar su estado lo inunda de enojo y rencor; a veces se necesita de esta fase para poder aceptar esta condición.
  3. Negociación: “Dios, déjame vivir al menos para ver a mis hijos graduarse”, “haré cualquier cosa por un par de años más”. La tercera etapa involucra la esperanza de que el individuo puede de alguna manera negociar, posponer o retrasar el tiempo o la muerte.
  4. Depresión: Durante la cuarta etapa, la persona que está viviendo un duelo o muriendo empieza a tener conciencia y a comprender lo que está ocurriendo. Debido a esto, el individuo puede volverse silencioso, rechazar visitas y pasar mucho tiempo llorando y lamentándose. No es recomendable intentar alegrar a una persona que está en esta etapa. Es un momento importante que debe ser procesado.
  5. Aceptación: Comienza a sentirse una cierta paz, se puede estar bien solo o acompañado, no se tiene tanta necesidad de hablar del propio dolor… la vida se va imponiendo. Además, el dolor físico y emocional pueden desaparecer.

Buscando ampliar el conocimiento y los beneficios que puede darnos el buscar la ayuda de un especialista en tanatología para enfrentar las pérdidas, cuando por su magnitud y complejidad rebasan nuestra capacidad para acometerlas exitosamente, en códigoF el podcast charlamos con la psicoterapeuta especialista en tanatología Marcela Latapí, con quien hicimos un programa extenso y profundo, que se estrenará el lunes 26 de agosto, y que lo invitamos a escuchar, convencidos que los conceptos y experiencias compartidos en el programa les resultarán interesantes y potencialmente útiles.

Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF

Fuentes:

Instituto Mexicano de Tanatología. (s.f.).
Conócenos.

Instituto Mexicano de Tanatología. (s.f.).
¿Qué es tanatología?

Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, INCMNSZ. (s.f.).
¿Qué es la tanatología?