Los resultados avalan el retraso de la segunda aplicación, en casos de ser necesario.
Un estudio recientemente publicado en The Lancet con el título “Early rate reductions of SARS-CoV-2 infection and COVID-19 in BNT162b2 vaccine recipients”, en el que los investigadores analizaron la respuesta inmunológica a la inoculación de la vacuna BNT162b2 desarrollada conjuntamente por Pfizer y BioNTech en trabajadores de la salud (TS) israelíes, mostró que el número de infecciones por SARS-CoV-2, y las tasas de COVID-19 sintomáticas después de la administración de la primera dosis de la vacuna, es sustancialmente inferior a las reportadas inicialmente en la fase 3 de estudios clínicos, lo que es altamente positivo.
La evidencia permitiría que las autoridades sanitarias de los países que sufren escasez de vacunas, o que tienen problemas de liquidez financiera para adquirirlas, retrasen temporalmente la administración de la segunda dosis para alcanzar una mayor cobertura poblacional con una sola inoculación, completando posteriormente el esquema completo.
Los científicos responsables del estudio aseguran que aunque los datos de los ensayos clínicos fase 3 de la vacuna BNT162b2 reportados por los desarrolladores mostraron una eficacia temprana de la vacuna para la prevención del COVID-19 del 52.4% después de la primera inoculación, y del 90.5% entre los días 2 y 7 después de la segunda, los resultados obtenidos por el nuevo análisis, muestran que la eficacia de la vacuna se sitúa entre el 89% y el 91% durante los días 15 y 28 después de la primera dosis, respectivamente.
Para determinar la reducción de las tasas asociadas con la inoculación de la vacuna, los investigadores analizaron una cohorte (grupo de individuos que comparten una característica común) retrospectiva de 9109 trabajadores de la salud (TS) que laboran en el Centro Médico Sheba, el hospital más grande de Israel, comparando a los TS vacunados, versus los no vacunados.
Los resultados muestran una clara diferencia en el número de contagios por SARS-COV-2 entre el personal que había recibido la primera y segunda dosis y los que no había recibido ningún tipo de protección vacunal.
De los 170 TS que se infectaron, 89 (52%) no estaban vacunados, 78 (46%) dieron positivo después de la primera dosis y solamente tres (2%) dieron positivo después de la segunda dosis. Las reducciones de la tasa ajustada de la enfermedad por COVID-19 fueron del 47% (IC del 95%: 17 a 66) y del 85% (71 a 92) durante los días 1 a 14 y los días 15 a 28 después de la primera dosis, respectivamente.
Los datos demuestran reducciones tempranas sustanciales en la infección por SARS-CoV-2 y las tasas de COVID-19 sintomáticas después de la administración de la primera dosis de vacuna.
Por otra parte, el laboratorio Pfizer envió a la Administración de Medicamentos y Alimentos de los EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés), nuevos datos que avalan la estabilidad de su vacuna almacenada a temperaturas de entre -25° C y -15° C (-13° F a 5° F) durante máximo dos semanas, lo que constituiría una alternativa o medida complementaria temporal a la necesidad de almacenamiento en congeladores de temperaturas ultra bajas. La empresa comentó que los datos también se enviarán a las agencias reguladoras globales en las próximas semanas.
Al respecto, Albert Bourla, presidente y Director ejecutivo de Pfizer, comentó: “Hemos estado realizando continuamente estudios de estabilidad para apoyar la producción de la vacuna a escala comercial, con el objetivo de hacer que la vacuna sea lo más accesible posible para los proveedores de atención médica y las personas en los EE. UU. y en todo el mundo. Apreciamos nuestra colaboración continua con la FDA y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), mientras trabajamos para garantizar que nuestra vacuna se pueda enviar y almacenar en condiciones cada vez más flexibles. Si se aprueba, esta nueva opción de almacenamiento ofrecería a las farmacias y centros de vacunación una mayor elasticidad en la forma en que administran el suministro de vacunas”.
Vale la pena comentar que, en la medida en que los desarrolladores de la BNT162b2 obtengan nuevas evidencias sobre la estabilidad de su vacuna, podrían llegar a modificarse y flexibilizarse las condiciones de almacenamiento, manejo y preservación de la misma.
Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF.
Fuentes:
The Lancet. (22 de febrero del 2021).
Early rate reductions of SARS-CoV-2 infection and COVID-19 in BNT162b2 vaccine recipients.
Pfizer. (22 de febrero del 2021).
PFIZER AND BIONTECH SUBMIT COVID-19 VACCINE STABILITY DATA AT STANDARD FREEZER TEMPERATURE TO THE U.S. FDA.