He Jiankui es condenado a tres años de prisión, por modificar genéticamente embriones humanos.

Con esta nota cerramos el círculo informativo que iniciamos el 10 de diciembre de 2018, cuando les dimos a conocer que el genetista chino He Jiankui, en ese entonces investigador de la Southern University of Science and Technology of China (SUSTech) en Shenzhen y su equipo, habían conseguido crear los primeros bebés modificados genéticamente en estado embrionario, utilizando el sistema de edición conocido como CRISPR, con el único objetivo de desactivar el gen CCR5, empleado por el virus del sida para acceder al sistema inmunológico humano.

Posteriormente, el 4 de febrero y el 3 de junio de 2019, dimos seguimiento a este caso, el que generó un fuerte rechazo entre la comunidad científica internacional, la que exigió a las autoridades chinas hacer una profunda investigación sobre este suceso.

El día de hoy, les informamos que Jiankui fue encontrado culpable de editar de forma ilegal genes de embriones con fines reproductivos, lo que lo llevó a ser sentenciado a 3 años de cárcel y el pago de una multa equivalente a 800 000 pesos mexicanos, aproximadamente.

Cuando la investigación estaba en proceso, el Biólogo David Baltimore, miembro del Instituto de Tecnología de California en Pasadena, EE. UU., y organizador del congreso donde el genetista presentó sus resultados, declaró: “Los avances en la investigación muestran que He Jiankui realizó un esfuerzo organizado para eludir todas las regulaciones y ser el primero en producir niños editados genéticamente. Me complace ver que las autoridades chinas planean castigarlo por sus transgresiones y monitorear el estado médico de los  niños”.

El tribunal que lo juzgó, consideró el genetista fue motivado por su ansia de “fama y fortuna”, lo que lo llevó a evadir deliberadamente “las regulaciones nacionales sobre investigación científica y gestión médica, rebasando toda línea ética”.