Entre las múltiples condiciones por las que algunos seres humanos relegan a otros congéneres a vivir apartados de la dinámica social, se encuentran las discapacidades psicosociales, intelectuales y cognitivas, las que incluyen, entre otros diagnósticos relacionados con la salud mental, la demencia, la esquizofrenia y el autismo.
Es penoso constatar la forma en la que muchos seres humanos son discriminados, ocultados, estigmatizados, torturados o descalificados para obtener la ayuda que necesitan, u obtener un empleo para el que están plenamente calificados, solamente por que sus capacidades son diferentes.
“A pesar de su vulnerabilidad, las personas con problemas de salud mental, incluyendo: esquizofrenia, trastorno bipolar, depresión, epilepsia, trastornos por consumo de alcohol y drogas, problemas de salud mental en niños y adolescentes e impedimentos intelectuales, han pasado ampliamente desapercibidas como un objetivo del trabajo del desarrollo. Esto sucede a pesar de la alta prevalencia de los problemas de salud mental, su impacto económico en las familias y las comunidades, la estigmatización, discriminación y exclusión asociadas. La necesidad para que los esfuerzos del desarrollo se dirijan a las personas con problemas de salud mental, está además reforzada por la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, la cual exige la incorporación de los asuntos de discapacidad en las estrategias para el desarrollo sostenible”.
Es tan compleja la problemática que rodea al tema de la inequidad relacionada con la salud mental, tan enraizados los tabúes e ideas preconcebidas y equivocadas sobre estas afecciones, la pobre y en muchos casos inexistente respuesta de los servicios sanitarios estatales para satisfacer a las necesidades no cubiertas de quienes las padecen, y sus familiares, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó la iniciativa QualityRights, a través de la que buscará impulsar sustancialmente la mejora de la calidad de los servicios de salud mental ofrecidos, o en su caso la correcta implementación, así como la promoción de los derechos humanos de personas con discapacidades psicosociales y su pleno y merecido empoderamiento
“En el contexto de la atención de la salud mental, muchas personas que acuden a los servicios de atención sanitaria se ven expuestas a condiciones de vida inhumanas, tratos o castigos crueles, violencia, abandono y abuso. Un elevado número de pacientes son sistemáticamente detenidos y sometidos a tratamientos sin su consentimiento informado. Las personas manifiestan que los servicios no responden a sus necesidades, ni les apoyan a vivir las vidas independientes que desearían vivir en la comunidad – más bien sus experiencias les dejan con sentimientos de desesperanza y desempoderados”.
A los estigmas, discriminación y desigualdades que impactan todos los aspectos de la vida, se añaden la negativa para vivir donde elijan, casarse, formar una familia, escolarizarse, buscar empleo y disfrutar de actividades de ocio, sufriendo más abusos emocionales, físicos y sexuales que el resto de la población.
Los cinco objetivos de la iniciativa Quality Rights
- Desarrollar las capacidades necesarias para combatir el estigma y la discriminación, para entender y promover los derechos humanos además de una eficiente recuperación.
- Mejorar la calidad de atención y las condiciones de derechos humanos en los servicios de salud mental y otros servicios relacionados.
- Crear una comunidad basada en servicios orientados a la recuperación que respeten y promuevan los derechos humanos.
- Desarrollar un movimiento de sociedad civil para promover e influenciar la elaboración de políticas.
- Reformar las políticas nacionales y la legislación acorde con la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CIDPD), y otros estándares internacionales de derechos humanos.
Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
Artículo 1.
“El propósito de la presente Convención es promover, proteger y asegurar el goce pleno y en condiciones de igualdad de todos los derechos humanos y libertades fundamentales por todas las personas con discapacidad, además de promover el respeto de su dignidad inherente.
Las personas con discapacidad incluyen a aquellas que tengan deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales a largo plazo que, al interactuar con diversas barreras, puedan impedir su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones con las demás”.
A través de Quality Rights, la OMS ofrece asesoría experta a las entidades sanitarias de los países interesados en desarrollar y establecer políticas, estratégias, prerrogativas y servicios, alineándolos con los estándares internacionales de derechos humanos, incluyendo la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
Para cumplir con los objetivos planteados, la OMS ofrece material informativo-educacional gratuito dirigido a profesionales; individuos con discapacidades psicosociales y personas que utilizan servicios de salud mental, familias, cuidadores y otros defensores, responsables del diseño de políticas, Organizaciones No Gubernamentales (ONGs), Organizaciones de Personas Discapacitadas (OPDs) y otros.
Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF.
Fuentes:
Organización Mundial de la Salud.
Salud Mental. WHO QualityRights initiative – improving quality, promoting human rights.
Organización Mundial de la Salud.
Calidad y Derechos, OMS: Actuar, unir y empoderar para la Salud Mental.
Organización Mundial de la Salud.
Salud Mental y desarrollo: Poniendo el objetivo en las personas con problemas de salud mental como un grupo vulnerable.
Organización de las Naciones Unidas.
Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad.