Uno de los temas sanitarios que siguen acusando una notoria falta de atención en las agendas políticas de muchas naciones, es la salud mental de sus habitantes, lo que se hace evidente al saber que la mayoría de ellas invierte, en promedio, solo el 2% de sus presupuestos sanitarios para su atención, porcentaje que incluso en el caso de los países de ingresos bajos y medios cae hasta el 1%
De acuerdo con las declaraciones realizadas en 2018 por el doctor Marcelo Valencia, Investigador en Ciencias Médicas del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente (INPRF), y que vale la pena rescatar, una de cada cuatro personas entre los 18 y los 65 años de edad en México tienen algún problema de salud mental, pero solo el 3% busca atención médica especializada, cifra que refleja una problemática que se vio incrementada por la pandemia de Covid-19, entre un 25 y un 30%.
“Sin embargo, y a pesar de que la salud mental es esencial para que los seres humanos disfrutemos de una vida satisfactoria, o lo más cercano a ella a nivel emocional y psicológico, en la gran mayoría de los sistemas de salud de los países de ingresos bajos y medios, el desconocimiento de la situación real sobre la misma; la falta de diagnósticos oportunos y precisos de las diferentes condiciones y padecimientos mentales, su desatención y falta de seguimiento para preservarla o restablecerla, son temas que muchas veces son ignorados, mal atendidos, infradiagnosticados y calificados como fútiles”. códigoF. ¿Cuál es la situación de la salud mental en el mundo?
En este contexto, es indispensable recordar que el pasado 4 de julio el gabinete de salud dio a conocer el “Plan Sectorial de Salud Mental y Adicciones 2023-2024” con el que las autoridades sanitarias plantean: “Contribuir a la promoción, prevención, atención y recuperación de las personas con problemas asociados a la salud mental y adicciones a través de la colaboración interinstitucional para mejorar el bienestar individual y social”, y en el que la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama), creada por decreto presidencial publicado el 29 de mayo del presente año en el Diario Oficial de la Federación (DOF), tiene un papel central.
Dando seguimiento a ello, el pasado 5 de septiembre, y durante una visita a las instalaciones del Hospital Psiquiátrico “Fray Bernardino Álvarez”, un grupo de trabajo de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), presentó a Juan Manuel Quijada Gaytán, titular de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama), el proyecto Insignia Cofepris, dirigido al fortalecimiento de los hospitales psiquiátricos en México.
“El objetivo de Insignia Cofepris es garantizar la prestación de servicios hospitalarios con altos estándares de calidad apegados a la normativa sanitaria vigente en hospitales psiquiátricos, con acompañamiento de las autoridades federales y estatales, siempre priorizando una perspectiva de derechos humanos”. Cofepris.
Haciendo referencia al abandono en el que se encuentran los hospitales psiquiátricos en nuestro país, Juan Manuel Quijada Gaytán, declaró: “Hoy es distinto. En el marco de las reformas a la Ley General de Salud en materia de salud mental, impulsamos el fortalecimiento de los procesos, la seguridad en los insumos y, desde luego, la calidad en la atención. Demostramos con hechos que la salud mental en México ahora es prioridad”.
Por su parte, Alejandro Svarch Pérez, comentó que al desarrollar este proyecto, se planteó el acercamiento de la regulación sanitaria de manera cooperativa para garantizar que los insumos utilizados en la atención de pacientes cumplan con estándares de calidad, seguridad y eficacia, lo que sin duda también se verá beneficiado por el nuevo laboratorio de farmacovigilancia impulsado por el Conasama, para registrar, analizar e informar los efectos secundarios de los psicofármacos.
“Es la primera vez que México se preocupa por validar la calidad de los psicofármacos con el fin de brindar mejor atención de la salud mental y de las adicciones a las personas usuarias de los servicios”. Lorena López Pérez, Directora de Gestión de los Servicios de Atención Psiquiátrica (SAP) de la Secretaría de Salud.
En la reunión de trabajo participaron, además de los titulares de la Cofepris y el Conasama, la comisionada de Operación Sanitaria, Bertha Alcalde Luján; el coordinador del Sistema Federal Sanitario, Carlos Aguilar Acosta, la directora general de el Conasama, Evalinda Barrón Velázquez; la directora del Hospital Psiquiátrico “Fray Bernardino Álvarez”, Rosa María Osiris Pazatán Galicia; el director de operaciones de la Cofepris, Alexandro Molina Gasman; y el director de Comunicación Social, Isaac Macip Martínez.
Algunos datos importantes acerca de la salud mental en el mundo:
- Durante el primer año de la pandemia de COVID-19, la prevalencia de la ansiedad y la depresión aumentó más de un 25 %;
- La salud mental es fluida; se modifica durante la vida de las personas, en la medida en que se ven enfrentadas a situaciones cambiantes y factores estresantes;
- Los países más gravemente afectados por la COVID-19, también mostraron los mayores aumentos en los trastornos depresivos y de ansiedad;
- Aproximadamente 1 de cada 8 personas en todo el mundo (casi mil millones) vive con un trastorno de salud mental;
- El suicidio es la causa de 1 de cada 100 decesos, siendo uno de los principales motivos de muerte en adolescentes;
- Cada 40 segundos muere por suicidio un ser humano;
- En promedio, los gobiernos gastan solo el 2% de sus presupuestos de salud en la atención de la salud mental, y los países de ingresos bajos y medios solo el 1 %;
- Aproximadamente la mitad de la población mundial vive en países que cuentan con 1 psiquiatra por cada 200 mil o más personas;
- Los especialistas en salud mental de niños y adolescentes en muchos países de bajos y medianos ingresos son “casi inexistentes”;
- La mayoría de las personas que viven con enfermedades mentales no reciben ningún tipo de atención;
- El 71% de las personas con psicosis no recibe tratamiento;
- En muchos países de ingresos bajos y medianos, los medicamentos psicotrópicos esenciales, a menudo no están disponibles, o no son asequibles;
- Las enfermedades mentales son una de las principales causas de discapacidad en todo el mundo, lo que supone un costo humano y económico inadmisible;
- El Foro Económico Mundial determinó que las condiciones de salud mental costaron $2.5 billones de USD en 2010, estimando que los costos aumentarán a $6 billones USD para 2030;
- Muchas personas que tienen algún padecimiento mental sufren violaciones de sus derechos humanos, enfrentan discriminación, son excluidos de la vida y el trabajo comunitario, son víctimas de abusos físicos, emocionales o sexuales, se les niega el derecho a la alimentación y la vivienda, y en algunos países, incluso, se les prohíbe votar o casarse;
- La atención en muchos países de las personas que sufren una enfermedad mental, se concentra en hospitales psiquiátricos de estancia a largo plazo, en los que los internos suelen ser retenidos en contra de su voluntad, experimentando hacinamiento, condiciones insalubres, violencia, o alimentación inadecuada;
- Solamente 1 de cada 4 países miembro de la OMS incluía a la salud mental como parte de la atención primaria, y menos de 1 de cada 5 tenía planes de concientización sobre salud mental, o prevención del estigma;
- La salud mental es un denominador común en todos los aspectos de la existencia y un requisito previo para el bienestar general y la calidad de vida;
- La rehabilitación psicosocial, las instalaciones de vivienda con ayudas a pequeña escala, y la ayuda financiera, son indispensable para aquellos que necesitan apoyos adicionales para reintegrarse con éxito a sus comunidades;
- Se requieren enfoques innovadores para capacitar a los médicos de atención primaria en salud mental, incrementando sustancialmente el número de especialistas, sobre todo en los países de ingresos bajos y medianos;
- Todos los esfuerzos para diseñar, implementar y supervisar la atención de la salud mental, deben incluir la participación significativa y respetuosa de las personas que han vivido experiencias, o viven con enfermedades mentales;
- La inversión en la salud mental tiene una de las mejores tasas de retorno financiero del ámbito sanitario. Se calcula que por cada dólar invertido en la ampliación de los servicios de atención de los trastornos mentales más frecuentes, como la depresión y la ansiedad, tiene un rendimiento de 5 dólares, en mejoras de salud y productividad.
Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF.
Fuentes:
Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios. (5 de septiembre del 2023).
Cofepris y Conasama proponen nuevo modelo para garantizar atención de calidad en hospitales psiquiátricos del país.
Secretaría de Salud. (4 de noviembre del 2018).
Alrededor de 25 por ciento de la población mexicana presenta algún problema de salud mental.
códigoF. (6 de julio del 2023).
Plan Sectorial de Salud Mental y Adicciones 2023-2024 | Ejemplo de rectoría, con miras a unificar el sistema fragmentado: Jorge Alcocer.
códigoF. (4 de abril del 2023).
¿Cuál es la situación de la salud mental en el mundo?
códigoF. (22 de julio del 2022).
Informe mundial de salud mental de la OMS: Transformando la salud mental para todos.
Diario Oficial de la Federación. (29 de mayo del 2023).
DECRETO por el que se crea la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones como un órgano administrativo desconcentrado de la Secretaría de Salud.