Entre otras consideraciones y recomendaciones, se actualizaron las tasas de riesgo de ingreso hospitalario para los pacientes que no presentan un cuadro grave de COVID-19.
En términos generales, podemos decir que actualmente las variantes predominantes del SARS-CoV-2 son menos agresivas y afortunadamente menos letales, lo que, sumado a los mayores niveles de inmunidad contra el virus conseguidos a través de la vacunación, y la resistencia adquirida o desarrollada, han conseguido que el número de casos graves y fallecimientos por COVID-19 vayan a la baja.
Es por ello que la Organización Mundial de la Salud actualizó por decimotercera ocasión sus Directrices sobre los tratamientos contra la COVID-19.
“La necesidad de tratamientos más eficaces para la COVID-19. La pandemia (y la explosión de investigaciones y desinformación) han puesto de relieve la necesidad de contar con una guía confiable, accesible y actualizada periódicamente para contextualizar los hallazgos emergentes y brindar recomendaciones claras para la práctica clínica”. OMS
La guía incluye niveles de referencia actualizados para las estimaciones de riesgo de ingreso hospitalario en pacientes que no presentan un cuadro grave de COVID-19, las que potencialmente ayudarán a los profesionales de la salud a identificar con claridad a las personas con amenaza de ingreso hospitalario: alto, moderado o bajo, ajustando el tratamiento farmacológico a las directrices de la OMS.
En esta nota les compartimos los puntos más importantes de la nueva edición, misma que pueden consultar aquí (en idioma inglés).
Las nuevas Directrices sobre los tratamientos contra la COVID-19, contemplan:
- Estimaciones de riesgo de referencia actualizadas para el ingreso hospitalario en pacientes con COVID-19 no grave, lo que garantiza la estratificación de las recomendaciones por grupos de riesgo bajo, moderado y alto
- Umbral actualizado para una reducción importante del riesgo de hospitalización en pacientes con COVID-19 no grave
- Datos que demuestran que no hay base para un cambio en las relaciones farmacocinéticas y farmacodinámicas de nirmatrelvir-ritonavir en esta fase de la pandemia
- Datos de ensayos adicionales que reducen la incertidumbre sobre los beneficios y daños previstos asociados con la ivermectina
- Consideración de evidencia de comparaciones indirectas entre medicamentos de interés para pacientes con COVID-19 no grave
- Nueva evidencia sobre VV116, un agente antiviral oral, evaluado en un ECA con 822 pacientes con COVID-19 no grave
Nuevos niveles de referencia:
- Alto: las personas inmunodeprimidas siguen teniendo un mayor riesgo si contraen la COVID-19, con una tasa de hospitalización estimada del 6%
- Moderado: las personas mayores de 65 años, las personas con afecciones como obesidad, diabetes y/o afecciones crónicas, en particular la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), o una enfermedad renal o hepática, cáncer, las personas con discapacidad y las personas con comorbilidades de las enfermedades crónicas tienen un riesgo moderado, con una tasa de hospitalización estimada del 3%
- Bajo: las personas que no pertenezcan a las categorías de riesgo alto o moderado tienen un riesgo de hospitalización bajo (0.5%). La mayoría de las personas pertenecen a la categoría de riesgo bajo
Tratamientos farmacológicos recomendados por la OMS:
Con respecto a los tratamientos farmacológicos para atender a los pacientes con riesgo de hospitalización alto y moderado, la OMS reitera su recomendación a la combinación de nirmatrelvir y ritonavir (Paxlovid), considerando sus beneficios terapéuticos, la facilidad de administración y los posibles efectos secundarios.
La Organización aclara que en los casos en los que el nirmatrelvir y ritonavir no estén disponibles, la segunda opción medicamentosa sean el molnupiravir y el remdesivir, desaconsejando el uso de estos últimos medicamentos en pacientes con riesgo de ingreso hospitalario moderado, ya que los daños potenciales superan los beneficios en este segmento.
En el caso de las personas con riesgo de hospitalización bajo, la OMS no recomienda ningún tratamiento antivírico, sugiriendo que la fiebre y el dolor sigan tratándose con analgésicos como el paracetamol.
Medicamentos desaconsejados:
La OMS desaconseja la administración de un nuevo antivírico (VV116) a los pacientes, y la recomendación sin reservas de no administrar ivermectina a los pacientes que no tengan un cuadro grave o crítico de COVID-19, salvo en el marco de ensayos clínicos.