Una vez más, pero ahora poniendo mayor énfasis en su relevancia como factor de riesgo para el desarrollo de la enfermedad grave por COVID-19, además del conocido desarrollo de diversos padecimientos crónicos como la diabetes, enfermedades cardiovasculares y algunos cánceres, la prestigiosa revista THE LANCET | Gastroenterology & Hepatology, dedica su editorial de agosto a este tema, con el significativo título “Double trouble: a pandemic of obesity and COVID-19”.
“La obesidad es una preocupación importante para la atención de la salud, incluso en los países de ingresos medios y bajos, debido a su asociación con enfermedades crónicas como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y algunos cánceres”. THE LANCET.
La investigación ha revelado que la obesidad debilita al sistema inmunológico, haciendo a las personas más susceptibles de adquirir, desarrollar y sufrir enfermedades infecciosas, como el caso del virus que desde hace casi 18 meses nos tiene en vilo, destacando que un índice de masa corporal superior a 23 kg/m2 se relaciona con mayores riesgos de resultados graves de COVID-19, particularmente en pacientes menores de 40 años.
“La ola actual de la pandemia de COVID-19, que ha causado la pérdida de miles de vidas jóvenes, debería ser una llamada de atención para que los responsables políticos aborden el problema de la pandemia de obesidad”. THE LANCET.
En ese contexto, los investigadores hacen notar, como caso de estudio, que la prevalencia del sobrepeso y la obesidad en la India, problema que se ha duplicado durante las últimas dos décadas en ese país, ha provocado un sustancial incremento en la carga de enfermedades no transmisibles, agravando paralelamente el número de contagios, el desarrollo de casos graves y las cifras de fallecimientos por COVID-19, situación que también padecemos en nuestro país, sin que hasta el momento las autoridades sanitarias de esta administración, ni de las precedentes, hayan conseguido ningún avance.
“El caso de México es de los más preocupantes. Cerca del 73% de la población mexicana padece de sobrepeso (en comparación con una quinta parte de la población en 1996). México tiene una de las tasas más altas de obesidad de la OCDE. Además, 34% de las personas obesas sufren obesidad mórbida <el mayor grado de obesidad>. De acuerdo con nuestras proyecciones, las enfermedades relacionadas con el sobrepeso reducirán la esperanza de vida en México en más de 4 años durante los próximos 30 años. Se trata de la mayor reducción proyectada entre los países de la OCDE. Pero lo más trágico es el crecimiento de la obesidad infantil, la cual se ha duplicado de 7.5 % en 1996, a 15 % en 2016”. Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.
Entendiendo que la obesidad es un factor de riesgo modificable para el desarrollo y el agravamiento de múltiples enfermedades crónicas no transmisibles, y algunas contagiosas como el COVID-19, la búsqueda del control de esta otra epidemia, debería estar en los primeros lugares de la agenda sanitaria de México.
Por: Manuel Garrod, miembro del Comité Editorial de códigoF.
Fuentes
The Lancet / Gastroenterology & Hepatology. (Agosto de 2021).
Double trouble: a pandemic of obesity and COVID-19.
The Lancet. (3 de noviembre del 2020).
Worldwide trends in body-mass index, underweight, overweight, and obesity from 1975 to 2016: a pooled analysis of 2416 population-based measurement studies in 128·9 million children, adolescents, and adults.