Como se ha difundido ampliamente, una de las emergencias sanitarias a nivel global, y también en nuestro país, es la provocada por la diabetes, la que constituye, por su alta prevalencia y estricto tratamiento no siempre observado por los pacientes, una terrible carga emocional y económica para las familias en cuyo seno hay algún miembro con esta enfermedad, y cuyo impacto financiero absorbe una elevada cantidad de recursos humanos, técnicos y financieros, para los institutos de salud del estado.
De acuerdo con los datos proporcionados por la Dirección de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), disponible en el “ Informe al Ejecutivo Federal y al Congreso de la Unión sobre la situación financiera y los riesgos del Instituto Mexicano del Seguro Social 2018-2019”, en el apartado “Defunciones por causas seleccionadas, 1976-2018”, se establece que la Diabetes Mellitus ocupa la primera posición como causa de defunción en el grupo de las Enfermedades No Transmisibles (ENT), teniendo en segunda posición a la cardiopatía isquémica, seguida por la enfermedad cerebrovascular y en la siguiente posición a las enfermedades relacionadas con la hipertensión.
Es por ello que los resultados no concluyentes de una investigación sobre la diabetes tipo 1 en infantes, realizada por un equipo de científicos de la Universidad de Melbourne, Australia, publicados en la revista JAMA Pediatrics a finales de enero de este año, abren una ventana de oportunidad para disminuir su crecimiento.
Como conclusión, los investigadores afirman haber descubierto una relación virtual entre la aplicación de la vacuna contra el rotavirus (uno de los principales patógenos responsables de la gastroenteritis), y la disminución de la prevalencia de diabetes tipo 1 en infantes, por lo que presumen que la vacuna tiene un efecto potencialmente preventivo contra su desarrollo en este segmento etario.
El título del estudio es “Association of Rotavirus Vaccination With the Incidence of Type 1 Diabetes in Children” (Relación entre la vacunación contra rotavirus y la incidencia de diabetes tipo 1 en niños”, lo que nuevamente pone en la mesa de análisis la relación existente entre las infecciones virales y el desarrollo de otros padecimientos, vertiente investigativa apasionante.
La primera pista entre la aparente conexión entre la aplicación de la vacuna contra el rotavirus y una menor incidencia de casos de diabetes tipo 1 en infantes, surgió en el ámbito vacunal Australiano, país que ostenta una altísima tasa del 90% en esta labor sanitaria esencial.
Los investigadores observaron que la tasa de desarrollo de Diabetes tipo 1 en la población de infantes que habían recibido la vacuna contra el rotavirus durante los últimos 12 años, había disminuido un 14%, lo que los impulsó a establecer una hipótesis que potencialmente podría validarse, o no, a través del estudio realizado. Hay que aclarar que la aplicación de la vacuna era el único eslabón consistente entre todos los niños que mostraban un descenso en la prevalencia del padecimiento.
En este punto nos parece importante aclarar la diferencia entre la diabetes tipo 1 y la 2.
La diabetes tipo 1 está considerada como una de las enfermedades crónicas infantiles más frecuentes, la que se desarrolla por la incapacidad del páncreas para producir la insulina que el organismo requiere para mantener dentro de parámetros normales, los niveles de glucosa en sangre.
Aunque todavía se desconocen con certeza irrefutable las causas exactas que originan el desarrollo de la diabetes tipo 1, los científicos consideran que en ello intervienen varios de los siguientes factores.
- Factor genético. Se sabe que la herencia incide en la predisposición para desarrollar diabetes, aunque tampoco es absolutamente determinante, ya que solamente el 13% de los niños y adolescentes con diabetes tienen un padre o hermano con esta enfermedad.
- Factor autoinmune. Nuestro sistema inmune tiene la tarea de proteger a nuestro organismo contra invasores potencialmente dañinos, pero no siempre es así. En determinadas enfermedades, como la diabetes, el lupus, Crohn y la artritis, por mencionar algunas de ellas, el sistema inmune se vuelve contra el cuerpo que debería defender. En el caso específico de la diabetes, el sistema inmune destruye a las células beta, responsables de la producción de insulina, lo que impulsa el desarrollo de esta enfermedad crónica.
- Factor ambiental. En este factor pueden estar implicados virus, sustancias tóxicas, algún elemento alimentario, u otro componente indeterminado. Al factor ambiental se le considera como un puente entre el factor genético y la autoinmunidad.
¿Cómo se desarrolla la diabetes tipo 1?
- Una persona hereda la predisposición a padecer diabetes.
- Esta tendencia puede permitir a un virus o a otro factor lesivo dañar a las células beta.
- Las células beta dañadas, y con otra apariencia, no son reconocidas como propias del organismo, por lo que el sistema inmune reacciona enviando anticuerpos a destruirlas.
- Como parte de la acción defensiva, los glóbulos blancos se dirigen al páncreas, lesionando más células beta.
Por otra parte está la diabetes tipo 2, la que hace años constituía la forma más frecuente de este padecimiento en personas mayores de 40 años, pero que ahora también se observa en adolescentes e incluso preadolescentes con obesidad.
A diferencia del tipo 1, en la diabetes tipo 2 las células beta sí producen insulina, pero el organismo se vuelve resistente a esa hormona, lo que le impide aprovecharla. En las fases tempranas de la enfermedad, la cantidad de insulina producida por el páncreas es normal e incluso elevada, pero con el tiempo tiende a disminuir.
¿Cómo se desarrolla la diabetes tipo 2?
- Factor genético o hereditario. La diabetes tipo 2 tiene mayores riesgos hereditarios que la tipo 1, ya que la mayoría de los casos, el padre o un abuelo la tuvo. Es interesante saber que en el caso de gemelos idénticos, si uno tiene la enfermedad, el otro tiene un 80% de posibilidades de desarrollarla.
- Estilo de vida. El 80% de las personas que desarrollan diabetes tipo 2 tienen obesidad y una vida altamente sedentaria. De este 80%, el 20% tiene a menudo un componente hereditario que causa la resistencia a la insulina.
Para concluir este artículo, hay que destacar que aunque no concluyentes, los resultados obtenidos en el estudio arrojan luz entre la relación del rotavirus y el desarrollo de diabetes tipo 1 en infantes, abriendo la posibilidad de validarla y establecer nuevos caminos investigativos que profundicen en el origen, lo que eventualmente impulsará el desarrollo de tratamientos preventivas contra esta enfermedad.
Fuentes:
JAMA Pediatrics.
Association of Rotavirus Vaccination With the Incidence of Type 1 Diabetes in Children.Research Letter. January 22, 2019.
Fundación (Española) para la diabetes.
Tipos de diabetes.
Instituto Mexicano del Seguro Social.
Informe al Ejecutivo Federal y al Congreso de la Unión sobre la situación financiera y los riesgos del Instituto Mexicano del Seguro Social 2018-2019. Entorno y situación financiera general. Página 10.